El bienestar de las personas es un tema que ha sido objeto de estudio y preocupación en diversas áreas de investigación. Un reciente estudio dirigido por la Universidad de Warwick ha arrojado luz sobre un aspecto sorprendente y fundamental del bienestar humano: la forma en que las personas perciben su propio sueño.
Los hallazgos revelan que la percepción subjetiva del sueño tiene un impacto mucho mayor en el bienestar general que los datos objetivos recopilados por la tecnología de seguimiento del sueño.

Registro de sueño y emociones: impacto en jóvenes
Durante un período de dos semanas, más de 100 participantes de edades comprendidas entre los 18 y 22 años fueron invitados a llevar un diario de sueño. Este diario incluía detalles sobre la hora de acostarse, la preparación para dormir, la duración del tiempo para conciliar el sueño, la hora de despertar y levantarse, y una evaluación general de la satisfacción con el sueño. Además, se pidió a los participantes que calificaran sus emociones positivas y negativas, así como su satisfacción con la vida en cinco momentos a lo largo del día siguiente.
Los datos objetivos de seguimiento del sueño se recopilaron mediante el uso de actígrafos en la muñeca, que miden el movimiento durante el sueño y estiman los patrones y ciclos de descanso. Los investigadores compararon estos datos con las percepciones subjetivas de los participantes sobre la calidad de su sueño y su estado emocional al día siguiente.
Los resultados sorprendieron a muchos: mientras que los datos de seguimiento del sueño no mostraron una correlación significativa con el bienestar subjetivo, la percepción propia del sueño sí influyó en cómo las personas se sentían y en su satisfacción con la vida. La Dra. Anita Lenneis, autora principal del estudio, señaló que «la forma en que los jóvenes evaluaban su propio sueño se vinculaba constantemente con cómo se sentían acerca de su bienestar y satisfacción con la vida».

Percepción del sueño: clave para el bienestar emocional
El estudio desafía la creencia de que la eficiencia del sueño medida por actigrafía es un indicador del bienestar. En cambio, sugiere que la satisfacción subjetiva con el sueño es más influyente en la forma en que las personas experimentan sus emociones y su satisfacción con la vida en el día siguiente. El Profesor Anu Realo, también de la Universidad de Warwick, añadió que «es la percepción de la calidad del sueño de las personas y no la eficiencia del sueño basada en la actigrafía lo que importa para su bienestar».
Estos resultados tienen implicaciones importantes para las intervenciones de mejora del sueño y el bienestar. El estudio sugiere que la evaluación positiva del propio sueño puede contribuir a un mejor estado de ánimo al día siguiente. El Dr. Lenneis señaló que, incluso si un dispositivo de seguimiento del sueño indica que alguien durmió mal, su percepción positiva del sueño puede mejorar su estado de ánimo. Por otro lado, si el rastreador de sueño dice que alguien durmió bien, pero no lo experimentó así, la información puede ayudar a reevaluar la calidad real del sueño.
Referencias:
The influence of sleep on subjective well-being: An experience sampling study: https://psycnet.apa.org/doi/10.1037/emo0001268