La demencia es una enfermedad devastadora que afecta a un número creciente de personas en todo el mundo, especialmente la enfermedad de Alzheimer y otras formas relacionadas. Ante esta preocupante tendencia, un nuevo estudio sugiere que incorporar aceite de oliva en la dieta podría ser una medida efectiva para reducir el riesgo de morir a causa de la demencia. Esta investigación ofrece esperanza al demostrar que factores del estilo de vida, como la alimentación, pueden jugar un papel preponderante en la prevención o el retraso de estas condiciones que afectan el cerebro.
El estudio y sus resultados
El estudio, realizado por científicos de la Escuela de Salud Pública TH Chan de Harvard, analizó cuestionarios dietéticos y registros de defunción de más de 90,000 estadounidenses durante un período de tres décadas. De entre los participantes estudiados, 4749 murieron a causa de la demencia. Los resultados revelaron que aquellos que consumían más de media cucharada de aceite de oliva al día presentaban un 28% menos de riesgo de morir a causa de demencia en comparación con aquellos que apenas consumían o nunca consumían este tipo de aceite.
Además, se encontró que reemplazar una pequeña cantidad de margarina o mayonesa en la dieta diaria con una cantidad equivalente de aceite de oliva se asociaba con un riesgo menor de morir por demencia, reduciendo la probabilidad entre un 8% y un 14%.

El impacto del aceite de oliva en la salud cerebral
El aceite de oliva es conocido por ser un elemento clave en la dieta mediterránea, la cual ha sido vinculada en estudios anteriores con la protección contra el deterioro cognitivo y el riesgo de enfermedad cardíaca. Los beneficios del aceite de oliva pueden deberse a sus compuestos antioxidantes, que, según la autora del estudio, Anne-Julie Tessier, podrían tener un efecto directo en el cerebro al cruzar la barrera hematoencefálica. Además, el aceite de oliva también puede favorecer la salud cardiovascular, lo que indirectamente beneficia la salud del cerebro.
Una opción segura y saludable
Cabe destacar que el estudio no puede demostrar de manera concluyente que el aceite de oliva sea la causa directa de la reducción del riesgo de demencia fatal. Por lo tanto, se necesitarían más investigaciones, como ensayos controlados aleatorios, para confirmar estos efectos y determinar la cantidad óptima de aceite de oliva que se debe consumir para obtener los máximos beneficios.
Aun así, los hallazgos refuerzan las recomendaciones dietéticas que promueven el uso del aceite de oliva como una opción segura y saludable en lugar de grasas menos beneficiosas, como la margarina o la mayonesa comercial. Al elegir el aceite de oliva, se puede disfrutar de un producto natural que no solo respalda la salud del corazón, sino que también podría tener efectos positivos en la salud del cerebro, reduciendo el riesgo de demencia fatal.

Conclusión
La demencia es una enfermedad preocupante que afecta a un número creciente de personas en diferentes partes del mundo. Frente a este escenario, el estudio que examinó la relación entre el aceite de oliva y la muerte relacionada con la demencia ofrece esperanza y evidencia sobre la importancia de una alimentación saludable para proteger nuestra salud cerebral.
Si bien se necesitan más investigaciones para confirmar los efectos del aceite de oliva en la prevención de la demencia, incorporar este alimento en nuestra dieta parece ser una opción segura y beneficiosa para nuestra salud en general. Además, al seguir las recomendaciones de una dieta saludable y equilibrada, como la dieta mediterránea, podemos aumentar nuestras posibilidades de mantener una buena salud cerebral y cardiovascular en el largo plazo.
Referencias:
Olive Oil Intake and Fatal Dementia Risk in Two Large Prospective U.S. Cohort Studies: https://www.dropbox.com/s/qh7w42rx59i08sy/Tessier%20abstract.docx?dl=0