Convencer a otras personas para que ofrezcan su tiempo o sus recursos a tu causa es todo un arte. En especial cuando no hay ninguna compensación tangible, pues todo se basa en tu habilidad de comunicación. ¿Qué puedes decir para cautivarlos? ¿Cómo puedes expresar tus intenciones en las redes sociales o en un correo electrónico? La mayoría opta por “mantener las cosas simples”, pero este tipo de escritura no es la más acertada.
Expertos en marketing han revelado que redactar textos cortos y contundentes es un gran error durante las campañas de crowdsourcing y crowdfunding. Es decir, cuando se llevan a cabo estrategias comerciales para obtener fondos en línea. Esto debido a que la prosa ligera no satisface las demandas mentales mínimas, por lo que los espectadores no se sienten motivados a participar.
Si realmente queremos obtener resultados positivos, necesitamos escribir mensajes más “complejos”. Aquí te dejamos algunos consejos que te ayudarán a lograrlo.
¿Cómo escribir textos más convincentes para tu audiencia?
Para poder determinar los rasgos de un buen texto comercial, los expertos de la Escuela de Negocios de la Universidad George Mason utilizaron un algoritmo de aprendizaje automático. Siendo precisos, el modelo de red de atención jerárquica (HAN), que clasifica documentos identificando sus características más destacadas y asignándolas a categorías predeterminadas.

Durante varias semanas, el equipo entrenó a esta IA usando las descripciones de 60.000 proyectos de DonorsChoose, una plataforma sin fines de lucro que permite a las personas donar directamente a proyectos de escuelas públicas. HAN identificó qué oraciones tenían un 4,5 % más de probabilidades de recibir financiación y creó un patrón consistente de características.
Esta sería la mejor forma de redactar un texto convincente para tu audiencia.
1. Piensa en oraciones un poco más largas
A menudo pensamos que los acrónimos y los términos internos son más llamativos, y es cierto, pero también son más difíciles de entender. Usar “KISS”, por ejemplo, en lugar de “keep it simple, stupid” o su traducción “mantenlo simple, estúpido” solo hará que las personas se confundan y pierdan interés. Por lo tanto, está bien escribir oraciones un poco más largas para explicar tu propósito.
HAN demostró que las oraciones más beneficiosas en DonorsChoose eran largas y fáciles de entender. Su puntaje de legibilidad promedio fue de 9,51, en comparación con 8,72 para las oraciones con contenido más concreto.
Así que deberíamos priorizar el mensaje antes que el número de palabras.
2. Escribe oraciones que exijan más del lector

Esta recomendación parece rivalizar con la anterior, pero realmente no es así. Con “oraciones exigentes” no nos referimos a textos con palabras complejas y difíciles de entender. Al contrario, hablamos de oraciones que brinden varias piezas de información a la vez.
Por ejemplo, en lugar de escribir en un lenguaje vago como «nuestra escuela tiene una población estudiantil muy diversa», una oración beneficiosa debería estar repleta de detalles. Podría ser, en este caso, “nuestra escuela es una escuela grande, con varias aulas en las que atiende a una población estudiantil diversa y vibrante: el 80% son estudiantes de color y casi la mitad son estudiantes del idioma inglés».
De esta forma estamos creando un texto de valor, diferente a otros y, por ende, que exige más atención.
3. Usa jergas solo cuando sean indispensables

El modelo HAN también enfatizó la importancia de aprender a usar modismos del lenguaje. A menudo se piensa que las jergas son malas, pero la investigación sugiere que puede haber excepciones a esta regla.
Si el uso de la jerga fortalece un argumento racional para obtener ayuda o financiación, por ejemplo, entonces es útil. De manera similar, si se realiza una narración de historias o testimonios, se deberían usar las jergas que se emplearon en ese momento para crear familiaridad y valor.
En definitiva, no hay razón para huir de estos argots o algarabías si tienen un propósito.
4. Los hechos le ganan a las emociones

Y como punto final tenemos la mentalidad cognitiva. Normalmente, los textos comerciales suelen desviarse hacia los mensajes cortos y emocionales. Es decir, frases que puedan servir de eslogan y de catalizador a la acción (para donar, comprar o participar).
Sin embargo, los análisis muestran que en ciertos contextos que exigen un pensamiento racional en lugar de una respuesta emocional, los comunicadores deben usar un lenguaje que apele a la cabeza y no al corazón.
Uno de estos contextos son las campañas de crowdsourcing y crowdfunding, pues los participantes necesitan argumentos para decidir qué hacer. De lo contrario, leerán el mensaje como si fuera una noticia o un simple comentario.
En conclusión, este análisis sugiere que una escritura simple y contundente no siempre es la más convincente para una audiencia. Exponer al lector una cantidad modesta de dificultades, relativamente extensa, y un caso detallado que tiene poca coloración emocional puede ser mucho mejor.
Así que esperamos que puedas usar esta guía para convencer a otras personas y obtener resultados más efectivos.
Referencias:
Writing More Compelling Creative Appeals: A Deep Learning-Based Approach https://dx.doi.org/10.1287/mksc.2022.1351