Un reciente estudio publicado en la revista Cell Genomics ha revelado cómo las células cancerosas, conocidas como «células zombi», se reviven a sí mismas y vuelven a replicarse. Esta investigación podría ser crucial para encontrar una solución efectiva y viable para prevenir la propagación del cáncer.

Las células mutantes pueden prevenir la propagación del cáncer al entrar en un estado de actividad reducida llamado senescencia. Sin embargo, los genes del cáncer pueden revivir estas células senescentes para que puedan replicarse nuevamente. El mecanismo para revivir las células senescentes solo se entendió parcialmente. Pero este nuevo estudio ha logrado arrojar luz sobre este proceso en las células de cáncer colorrectal.

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Cómo evitar que las células cancerosas escapen de la senescencia

Los investigadores descubrieron que cuando una célula comienza a volverse cancerosa, comienza a replicarse muy rápidamente y eso desencadena la senescencia. Una vez que la célula se vuelve senescente, a menudo comienza a producir una proteína particular que la ayuda a salir de la senescencia. El siguiente paso es encontrar una sustancia que se una a esta proteína y evite que se una a otras proteínas, para que estas células permanezcan en senescencia y no se reproduzcan.

Los investigadores del laboratorio Herbig de la Facultad de Medicina de Rutgers, Nueva Jersey, comenzaron examinando la progresión de las células cultivadas en placas de Petri y luego confirmaron sus hallazgos en tejidos tomados de pacientes reales con cáncer de colon. El estudio reveló que la entrada y salida de la senescencia está precodificada y mediada por los mismos tipos de proteínas, los factores de transcripción AP1.

Este estudio identificó a POU2F2 como una proteína crítica que promueve el escape de la senescencia. También mostró su papel en el desarrollo del cáncer colorrectal. La sobreexpresión y el aumento de la actividad de POU2F2 están asociados con la inflamación y proliferación celular, así como con la disminución de la supervivencia del paciente. POU2F2 se ha implicado en la progresión de varios tipos de cáncer y podría ser un objetivo farmacológico viable.

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Rastrear la progresión del cáncer con perfil multiómico

Los investigadores rastrearon la progresión desde la senescencia celular hasta el escape con una técnica llamada perfil multiómico resuelto en el tiempo, que les permitió ver qué genes se activaban y desactivaban y qué proteínas se volvían más y menos comunes con el tiempo.

Una vez que esta técnica reveló que los factores de transcripción AP1 eran particularmente activos antes de que las células escaparan de la senescencia, los investigadores desactivaron los genes que crean tales proteínas. De esa manera descubrieron que las células ya no podían volver a la vida y comenzar a reproducirse.

Según las palabras del autor principal del estudio, Ricardo Iván Martínez-Zamudio, el cuerpo humano tiene mecanismos de defensa para combatir ciertos tipos de tumores. Estos implican que las células mutantes se mueran por completo en lugar de reducir su actividad a la senescencia. Aunque no se sabe con certeza por qué esta respuesta no es más común, se cree que matar muchas células continuas podría causar daños irreparables en tejidos importantes. Por lo tanto, el cuerpo utiliza la senescencia como una forma de protección contra algunos tipos de tumores de tejidos sólidos. El objetivo de los investigadores es encontrar una manera de ayudar al cuerpo a mantener esta defensa funcionando correctamente.

Referencias:

Escape from oncogene-induced senescence is controlled by POU2F2 and memorized by chromatin scars: https://doi.org/10.1016/j.xgen.2023.100293

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