Para determinar si un trozo de roca es o no un meteorito, los cazadores de tesoros usan imanes manuales. Principalmente porque casi todos los meteoritos son atraídos por los minerales ferromagnéticos, aunque no tengan esas propiedades. 

Se trata de un método de validación popular y bastante efectivo. Sin embargo, los científicos del MIT aseguran que los imanes podrían haber borrado accidentalmente  miles de millones de años de datos invaluables encerrados en estas rocas espaciales. Como por ejemplo, el registro de sus campos magnéticos.

Tocar un meteorito con un imán como el neodimio borra y sobrescribe los registros, según comentan. Esto significa que hemos estado perdiendo información sobre los misterios más antiguos de nuestro Sistema Solar desde hace siglos. 

Más imanes, menos resultados

Diferentes tipos de imanes / Vía Flirck

Aunque estamos en la era de las sondas y los vehículos exploradores, la información que podemos sacar de los meteoritos, a menudo, no podemos obtenerla en ningún otro lugar. 

Estas rocas almacenan en su campo magnético registros inestimables de la formación y la evolución planetaria. De hecho, los estudios de su paleomagnetismo han permitido determinar la existencia del disco protoplanetario, la evolución térmica y la diferenciación de los planetesimales. 

No obstante, un meteorito suele perder sus propiedades magnéticas cuando se expone a otro campo magnético. Es por eso que, desde el punto de vista científico, los imanes son una amenaza. 

“La exposición a un campo magnético puede tener un efecto interesante sobre los minerales. A medida que se forma un trozo de roca, los cristales dentro de los minerales magnéticos pueden alinearse con el campo magnético y, en algunos casos, se magnetizan proporcionando un registro de la fuerza y la alineación del campo magnético que lo causó. Esto también sucede con los meteoritos expuestos a otros campos magnéticos dado que muchos tienen un contenido significativo de hierro”.

Foteini Vervelidou, científico planetario en el MIT

Meteoritos que ahora tienen una explicación

Fragmentos del Black Beauty, un meteorito marciano / Créditos: UNM

Para demostrar su hipótesis sobre los imanes, el equipo analizó 9 fragmentos de un famoso meteorito recuperado de las arenas del desierto de Marruecos en 2011: el Black Beauty o Northwest Africa 7034.

Este es uno de los meteoritos marcianos más antiguos de la Tierra, y contiene fragmentos que datan de hasta 4.400 millones de años. Es decir, cuando el Sistema Solar y los planetas dentro eran solo bebés.

Los científicos pensaron que esta roca debía retener un registro magnético de Marte, pero cuando fueron a verificarlo no encontraron nada. Entonces, calcularon el tamaño de un campo magnético alrededor de un imán y el efecto que ese campo tendría en rocas de varios tamaños. A continuación, probaron los resultados de sus cálculos en trozos de basalto terrestre, midiendo la magnetización en la roca antes y después de la exposición al imán.

Al hacerlo, notaron que muchos de los fragmentos se desmagnetizaron por completo después de exponerlos al imán manual. Estos hallazgos concuerdan con la desmagnetización parcial observada en los registros del meteorito. Por lo tanto, es probable que sus datos valiosos fueran borrados en 2011 por los imanes de los cazadores de tesoros.

¿Podemos recuperar estos registros magnéticos? 

Lamentablemente, los investigadores del MIT descubrieron que ninguno de los fragmentos tenía rastro de estos registros. Todos habían sido borrados por completo, lo que significa que el Black Beauty seguirá siendo una roca vacía por toda la eternidad. 

Sin embargo, aún hay esperanzas para los otros meteoritos. Existen técnicas disponibles que pueden ayudar a identificar su naturaleza sin destruir la delicada información magnética que alberga en su interior. Todas estas técnicas han sido probadas en estudios recientes y se cree que pueden usarse no solo para distinguir entre meteoritos y rocas terrestres, sino también para distinguir diferentes tipos de meteoritos.

Así que puede que en un futuro próximo estén disponibles más datos. Eso sí, siempre que mantengamos a los imanes alejados de estas rocas espaciales. 

Referencias: 

Hand magnets and the destruction of ancient meteorite magnetism  https://www.doi/epdf/10.1029/2022JE007464

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