En ocasiones, los elefantes exhiben comportamientos atípicos que demuestran cuán inteligentes son en el fondo. Este es uno de esos casos.
Pang Pha, una elefante asiática del zoológico de Berlín, fue criada por cuidadores que le daban plátanos amarillos. Ahora, ya adulta, ha aprendido a pelarlos por sí misma usando su trompa.
Según comentan, primero agarra el plátano, luego lo sacude para deshacerse de la cáscara, y finalmente recoge la pulpa. Pero, curiosamente, solo lo hace si está a solas. Además, Pha no come plátanos demasiado maduros, únicamente se dispone a pelar los que son verdes o amarillos con manchas marrones. Por lo tanto, al igual que los humanos, parece ser consciente de cuáles son los ejemplares más dulces.
Este comportamiento “singular” confirma que los elefantes nos imitan de algún modo, con sus sorprendentes capacidades cognitivas y de manipulación. Después de todo, sus cuidadores nunca le enseñaron esta técnica: ellos siempre le daban de comer plátanos sin cáscara.
Una elefante capaz de interpretar los gestos humanos
El caso de esta elefante asiática se recoge en un estudio publicado en el Current Biology. El equipo reconoce que han descubierto un comportamiento único en la especie, que podría ser una combinación de varios factores como la habilidad, velocidad, individualidad y una posible inspiración en los humanos.
Los elefantes pueden imitar gestos humanos y clasificar a las personas en grupos étnicos, eso se sabe desde hace algunos años. Sin embargo, las conductas complejas de manipulación derivadas de los humanos, como el hecho de pelar plátanos, nunca antes habían sido estudiadas. Esta fue la primera vez que los cuidadores vieron de cerca una destreza realmente notable en la trompa de los paquidermos.
Cuando le ofrecían plátanos amarillos, Pha comía todos los que podía aunque guardaba el último para pelarlo más tarde. Además, siempre realizaba el mismo proceso para pelar los plátanos enteros: los agarraba con la trompa, los lanzaba para deshacerse de la cáscara, y finalmente recogía la pulpa dulce para introducirla en su boca.
Esto ha llevado a los expertos a preguntarse si dichos hábitos se transmitirían entre familias de paquidermos o, por el contrario, solo pueden ser adquiridos a través de la observación.
Plátanos y conductas aprendidas

La habilidad de pelar plátanos es, según los autores, rara en los elefantes. Hay informes anecdóticos y videos en internet de ejemplares pelando esta fruta, ya que aman su sabor. Sin embargo, ningún otro paquidermo en el zoológico de Berlín se dispone a pelarlos como Pha.
Aunque no está claro por qué lo hace, los investigadores creen que pudo adquirir esa habilidad mediante el aprendizaje por observación de los humanos. Aunque todos los elefantes fueron alimentados de la misma forma, es posible que Pha prestara más atención a la técnica que usaban sus cuidadores.
Por lo tanto, no es un comportamiento que se pueda heredar. Para Anchali, la hija de esta elefante, podría ser difícil o imposible pelar plátanos igual que su madre.
“Los elefantes tienen una destreza con la trompa realmente notable y su comportamiento está determinado por la experiencia. Pang Pha aprendió a pelar plátanos por sí misma, pero imitando los gestos humanos necesarios para sacar la pulpa de la cáscara. Ese es su inusual talento».
Michael Brecht, investigador en el zoológico de Berlín.
En definitiva, los elefantes nunca dejan de sorprendernos. No solo son animales inteligentes, empáticos y altruistas, también son expertos en el arte de la imitación. De hecho, estudios previos han demostrado que los elefantes asiáticos consuelan a sus compañeros en peligro con caricias y vocalizaciones, como los seres humanos.
Por lo tanto, puede que seamos su modelo a seguir en el reino animal.
Referencias:
Elephant banana peeling https://doi.org/10.1016/j.cub.2023.02.076