Muchas veces, cuando estamos discutiendo con nuestros amigos o familia, se generan malentendidos. Algunas personas son demasiado directas y otras simplemente esperan que leamos entre líneas, así que llega un punto en el que se interrumpe la comunicación.
Para los psicólogos este es el peor escenario posible, pues afirman que no comunicarse claramente solo provoca más conflictos a largo plazo. Pero una nueva investigación encontró que la falta de comunicación puede, de hecho, ayudar constructivamente a la resolución de problemas. Esto debido a que facilita la búsqueda de una solución que beneficie a ambas partes.
Algunos silencios y malentendidos son buenos
Los investigadores de la Universidad de Buffalo, la Universidad de Chapman y la Universidad de Nueva York trabajaron en conjunto para dar con este hallazgo. Primero, analizaron la raíz de varios conflictos interpersonales en grupos diversos. Y luego, recrearon el famoso modelo matemático de diversidad creado por Lu Hong y Scott Page para entender las dinámicas sociales.

Al hacerlo, descubrieron que la falta de comunicación crea diversidad al presentar oportunidades para que las partes exploren mejor las soluciones disponibles cuando participan activamente en la resolución de problemas. En pocas palabras, algunos malentendidos y silencios pueden hacernos ver posibilidades que nunca antes hubiéramos considerado.
“Notamos que los grupos diversos bajo ciertas condiciones podrían superar a los grupos uniformes de mayor capacidad, lo que lleva a la afirmación de que la diversidad triunfa sobre la capacidad”.
Ryan Muldoon, profesor asociado de filosofía en la Universidad de Buffalo
Esto sugiere que, cuando ocurre una falta de comunicación, lo que importa es cómo nos organizamos para resolverla. El hecho de que surjan malentendidos es solo parte de la dinámica, y está bien.
Beneficios en la falta de comunicación
Durante el experimento, los grupos de mayor capacidad solían pensar en un problema de la misma manera que cuando hacían predicciones. Es decir, terminaban explorando soluciones similares que solo causaban más conflicto. En cambio, los grupos exploraban colectivamente más opciones, lo que aumentó la posibilidad de mayores éxitos y reconciliaciones.
Por supuesto, no todos los malentendidos son beneficiosos. El equipo simuló diferentes formas en que las personas pueden entenderse mal entre sí y descubrió que, en las grandes corporaciones, la falta de comunicación puede causar un ambiente laboral tenso.

“La estructura adicional nos permitió ver diferentes formas en que los grupos pueden trabajar juntos y demostrar cómo algunos errores de comunicación pueden empeorar los errores, mientras que otros pueden disminuir el daño que podrían derivarse de esos errores”.
Ryan Muldoon
Por lo tanto, podríamos decir que la falta de comunicación ayuda en la búsqueda de una solución, pero solo para los grupos diversos. Un hallazgo sumamente importante puesto que, cuando trabajamos en grupo, a veces cometemos un error de comunicación al azar. Saber que estos errores pueden llegar a ser beneficiosos para la resolución del problema hace que el miedo de cometerlos sea menor.
Además, estos hallazgos sugieren que a menudo es mejor dejar pasar los errores en lugar de enfocarnos en arreglarlos.
“Lo que descubrimos es que la forma en que organizamos los grupos es muy importante cuando evaluamos los beneficios de la diversidad, especialmente cuando podemos comunicarnos mal”.
Ryan Muldoon
Así que deberíamos dejar de preocuparnos por los malentendidos y los silencios incómodos para empezar a centrarnos en las posibilidades que surjan de ellos.
Referencias:
Does (mis)communication mitigate the upshot of diversity? https://doi.org/10.1371/journal.pone.0283248