Las enfermedades transmitidas de animales a humanos, conocidas como zoonosis, han sido una preocupación constante para la salud pública mundial en los últimos años. Desde el COVID-19 hasta la viruela del mono, el Mers, el ébola, la gripe aviar, el zika y el VIH, estas enfermedades se han multiplicado, lo que hace temer nuevas pandemias.
Una zoonosis es una enfermedad o infección transmitida de animales vertebrados a personas, y viceversa. Los patógenos involucrados pueden ser bacterias, virus o parásitos. Estas enfermedades se transmiten ya sea directamente durante el contacto entre un animal y un humano, o indirectamente a través de los alimentos o a través de un vector como un insecto, una araña o un ácaro.

Zoonosis y el aumento de enfermedades de animales a humanos
El término «zoonosis» incluye una amplia variedad de enfermedades que pueden afectar al aparato digestivo, al aparato respiratorio o al sistema nervioso en el caso de la rabia. La gravedad de estas enfermedades en humanos varía mucho según la enfermedad y la virulencia del patógeno, pero también de la persona infectada, que puede tener una sensibilidad particular al patógeno.
Los murciélagos actúan como reservorio de muchos virus que afectan a los humanos. Algunos se conocen desde hace mucho tiempo, como el virus de la rabia, pero muchos han surgido en las últimas décadas, como el ébola, el coronavirus del SARS, el SARS-CoV-2 (causante del COVID-19) o el virus Nipah, que apareció en Asia en 1998. Otros mamíferos, como el ganado vacuno, los cerdos, los perros, los zorros, los camellos y los roedores, también suelen desempeñar el papel de huéspedes intermediarios. Todos los virus responsables de las grandes pandemias de gripe tenían un origen aviar, directo o indirecto.
Habiendo aparecido hace miles de años, las zoonosis se han multiplicado en los últimos 20 o 30 años. El crecimiento de los viajes internacionales les ha permitido extenderse más rápidamente. Al ocupar áreas cada vez más grandes del planeta, los humanos también contribuyen a perturbar el ecosistema y promover la transmisión de virus. La agricultura industrial aumenta el riesgo de que los patógenos se propaguen entre los animales. El comercio de animales salvajes también aumenta la exposición humana a los microbios que pueden portar. La deforestación aumenta el riesgo de contacto entre la vida silvestre, los animales domésticos y las poblaciones humanas.

Cambio climático y pandemias: una relación preocupante.
El cambio climático también representa una amenaza significativa. Un estudio publicado por la revista científica Nature en 2022 advirtió que el cambio climático empujará a muchos animales a huir de sus ecosistemas en busca de tierras más habitables. Al mezclarse más, las especies transmitirán más sus virus, lo que promoverá la aparición de nuevas enfermedades potencialmente transmisibles a los humanos.
El Grupo de Expertos en Biodiversidad de la ONU ha advertido que sin medidas preventivas, las pandemias se presentarán con mayor frecuencia. También se propagarán más rápidamente, tendrán un impacto más devastador en la economía global y matarán a más personas. En octubre de 2020, se emitió esta advertencia.
La revista Science de 2018 publicó estimaciones que indican que hay 1,7 millones de virus desconocidos en mamíferos y aves, de los cuales entre 540.000 y 850.000 tienen la capacidad de infectar a los seres humanos. El aumento de las interacciones humanas con la vida silvestre y la expansión de las actividades humanas son factores que aumentan el riesgo de que los virus capaces de infectar a los humanos encuentren un huésped.
Referencias:
Why are animal-to-human diseases on the rise?: https://medicalxpress.com/news/2023-04-animal-to-human-diseases.html