Un equipo de científicos de Scripps Research y la Universidad de Carolina del Norte han encontrado anticuerpos en la sangre de ciertos donantes de COVID-19 que pueden bloquear la infección de un amplio conjunto de coronavirus. El estudio podría conducir al desarrollo de una amplia vacuna contra el coronavirus y terapias de anticuerpos relacionadas que podrían usarse contra futuras pandemias de coronavirus, así como contra cualquier variante futura del SARS-CoV-2.
Los científicos estudiaron los anticuerpos y sus sitios de unión al virus y encontraron que los anticuerpos pueden proteger contra los tres coronavirus mortales recientes. Es decir, SARS-CoV-1, SARS-CoV-2 y MERS-CoV. El SARS-CoV-2, junto con el SARS-CoV-1 y el MERS-CoV. Todos estos pertenecen a un amplio grupo de coronavirus conocidos como betacoronavirus, que mutan a un ritmo moderadamente alto, lo que crea un desafío importante para el desarrollo de vacunas y terapias de anticuerpos contra ellos.

Nuevas esperanzas en la lucha contra el coronavirus
Durante los últimos dos años, los laboratorios Andrabi/Burton y Wilson han encontrado evidencia de que el SARS-CoV-2 y otros betacoronavirus tienen un sitio vulnerable que no muta mucho. Este sitio, que se encuentra en la región S2 (o base) de la proteína del pico viral, está relativamente conservado en los betacoronavirus que infectan a una variedad de especies animales.
El sitio S2 juega un papel clave en cómo los betacoronavirus progresan desde la unión al receptor hasta la fusión de la membrana. Esta permite la entrada a las células huésped en el tracto respiratorio. En un estudio del que se informó el año pasado, los laboratorios Andrabi/Burton y Wilson descubrieron que algunos anticuerpos humanos pueden unirse a este sitio en el SARS-CoV-2 de una manera que aparentemente interrumpe la fusión viral y bloquea la infección. La existencia de un sitio tan vulnerable plantea la posibilidad de apuntar a él para brindar una protección amplia y duradera contra los betacoronavirus.
Los investigadores realizaron una búsqueda exhaustiva de anticuerpos anti-S2 en muestras de sangre de voluntarios humanos que se habían recuperado de COVID-19, habían sido vacunados o se habían recuperado de COVID-19 y luego habían sido vacunados. En general, los investigadores identificaron y caracterizaron 32 de estos anticuerpos dirigidos a S2.

¿Posible vacuna universal contra el coronavirus?
Un grupo de voluntarios participó en el estudio. Este incluyó personas que habían sido vacunadas, personas que se habían recuperado de COVID-19, y personas que habían pasado por ambas situaciones. Los resultados mostraron que la mayoría de los voluntarios del último grupo tenían anticuerpos contra el sitio vulnerable S2. Esto fue una sorpresa para los investigadores. En total, se identificaron y caracterizaron 32 anticuerpos dirigidos a S2.
En estudios de laboratorio, se encontró que varios de estos anticuerpos brindaban una protección sin precedentes contra el SARS-CoV-2, así como contra otros betacoronavirus. Los investigadores creen que la información obtenida de los anticuerpos podría ser útil en el diseño de futuras vacunas pan-betacoronavirus. De hecho, los investigadores ya han utilizado estos hallazgos para diseñar una posible vacuna que podría almacenarse para limitar futuras pandemias. También están considerando una combinación terapéutica de diferentes anticuerpos dirigidos a S2 para prevenir o reducir la enfermedad causada por un nuevo betacoronavirus.
Referencias:
Broadly neutralizing anti-S2 antibodies protect against all three human betacoronaviruses that cause deadly disease: https://dx.doi.org/10.1016/j.immuni.2023.02.005