¿Tienes hoyuelos o conoces a alguien que los tenga? Estas lindas hendiduras en las mejillas hacen que las personas parezcan mucho más atractivas y alegres cuando sonríen. Pero, aunque cueste creerlo, los hoyuelos son un defecto.
Quienes poseen hoyuelos, tienen un problema en uno de los músculos faciales. Nada serio, por supuesto, pero sí bastante inusual. Es por eso que solo una de cada cinco personas tiene hoyuelos, aproximadamente el 20% de la población mundial.
El origen del hoyuelo: las hendiduras en una o ambas mejillas
Primero, es importante aclarar que se pueden formar hoyuelos en otras partes del cuerpo, como la espalda baja, la cadera o la barbilla. Sin embargo, es más común que esto suceda en las mejillas, por eso hablaremos específicamente de este tipo de “huequitos”.
Los hoyuelos faciales se forman en la zona de la hipodermis, donde están las diversas fibras musculares que se adhieren a la piel exterior. En este lugar, se encuentra un músculo llamado zygomaticus major (ZMj), o simplemente cigomático, que crea nuestras expresiones faciales.
Por lo general, el músculo cigomático es una sola pieza que rodea la comisura de los labios. Sin embargo, algunas personas tienen un cigomático bífido. Esto quiere decir que su músculo facial se divide en dos: una parte arriba de la comisura de la boca y otra debajo. Por lo tanto, al sonreír, se crea una pequeña hendidura entre ambas partes: el famoso hoyuelo.
Los hoyuelos son, como podemos ver, defecto que suele generarse por herencia genética. Aunque no se trata de una ciencia exacta.
¿Qué tan probable es tener hoyuelos?
Los hoyuelos se transmiten genéticamente. De acuerdo con un estudio reciente, las personas con un padre con hoyuelos tienen entre un 25 % y un 50 % de probabilidades de tener hendiduras, mientras que las personas con dos padres con hoyuelos tienen entre un 50 % y 100% de probabilidad. Esto debido a que se trata de un gen dominante, que solo se requiere uno de un par de genes para codificar el hoyuelo.
Pero no se sabe qué gen o genes pueden estar involucrados, así que es muy difícil crearlos artificialmente. Además, muchas personas tienen hoyuelos que desaparecen a medida que envejecen. Principalmente porque pierden grasa en esta área, y los músculos faciales se estiran haciendo que los hoyuelos desaparezcan.

«La grasa en el área puede remodelarse con el tiempo, lo que puede hacer que los hoyuelos parezcan más o menos evidentes a medida que la cara envejece».
Ross Elledge, cirujano oral y maxilofacial en el Reino Unido
Incluso existen niños que nacen sin estas lindas hendiduras, porque las desarrollan más tarde.
En definitiva, muy pocas personas tienen este defecto atractivo de por vida, por lo que los hoyuelos son un rasgo difícil de conseguir. Aunque actualmente es posible burlar a la genética y crear hendiduras en las mejillas con ayuda de una cirugía estética. El proceso en cuestión se conoce como “dimpleplastía”, y consiste en formar una intersección que va desde la comisura de la boca hasta la esquina del ojo. Esto con la finalidad de unir la parte inferior de la piel al músculo y formar un hoyuelo.
Dicha operación logra imitar el defecto natural, pero no es igual. Los hoyuelos naturales se pueden formar en una o ambas mejillas, y suelen variar en profundidad y tamaño. Es por eso que se consideran atractivos: nunca sabes qué podrás encontrar al ver a una de estas personas sonreír.
Referencias:
Prevalence of Bifid Zygomaticus Major Muscle https://journals. doi10.1097/SCS.0000000000005261x