Hay muchos mitos sobre la figura de Atila y los hunos. En algunos se dice que eran una tribu de bárbaros que saquearon gran parte de Europa. En otros se habla de que fueron los causantes de la caída del Imperio Romano. Pero los registros arqueológicos sugieren que los hunos eran guerreros nómadas bastante civilizados.

De hecho, de su lenguaje derivan el turco y el mongol que se usan actualmente en el noroeste de Asia. 

El problema es que la mayoría piensa en estos nómadas como expertos jinetes que oprimían a los pueblos conquistados. Y si bien, parte de esa leyenda es cierta, no merecen tener una reputación tan mala.

Los hunos empezaron siendo pastores 

Los hunos amaban galopar en sus caballos / Créditos: Okdiario

El origen de los hunos es todo un misterio pero se cree que, antes de ser guerreros, fueron un pueblo nómada dedicado al pastoreo.  

Su estilo de vida, de acuerdo con el historiador Ammianus, no era muy diferente al de otros pueblos euroasiáticos. Comían raíces de plantas silvestres y la carne semicruda de cualquier animal para sobrevivir, ya que vivían cerca del Mar Caspio (actual Kazajistán). Y a modo de ejercicio, montaban a caballo día y noche.

El término “Hunnus” con el que ahora se les conoce fue puesto por un historiador romano del primer siglo d.C: Tácito. Sin embargo, este no dio una gran explicación sobre la apariencia de los hunos. Solo sabemos que eran robustos y tenían rostros llenos de cicatrices. 

Justamente por esta razón es que son confundidos a menudo con los mongoles. Un pueblo asiático que sometió a China durante cientos de años. Pero aquí hay un punto importante, los hunos que conquistaron Europa no eran exactamente los mongoles de Asia Central.

El pueblo que forzó la construcción de la Gran Muralla China entre los siglos V a.C. y XVII d.C se llamaba “Xiongnu”, que a menudo identifican como “los hunos” o “la confederación de guerreros nómadas”. 

Los Xiongnu pelearon en contra del emperador de China por varias décadas hasta que se vieron forzados a dividirse en dos bandos: un grupo oriental, que se sometió a los chinos, y un grupo occidental, que fue expulsado hacia Asia Central.

Aquellos que fueron expulsados, se trasladaron al oeste y recogieron otros pueblos en el camino. Al final crearon una horda que se cree que fue la que invadió Europa. En esencia, porque un estudio de 2018 encontró que, genéticamente, los hunos eran una mezcla de pueblos del este de Asia y del oeste de Eurasia

Por lo tanto, los hunos, tal y como los conocemos, eran pastores que tuvieron que emigrar a Europa entre los años 376 y 476 d.C.

Sobre la cultura de los hunos

Los hunos fueron recogiendo a muchos pueblos y enfrentándose a otros / Créditos: Quinotauro

Los mitos concuerdan en una cosa: los hunos eran guerreros nómadas. Sin embargo, la evidencia arqueológica sugiere que adoptaban ocasionalmente un estilo de vida sedentario. 

Tenían grandes residencias hechas de madera y tablas pulidas, según el historiador bizantino del siglo V Prisco. Así como banquetes con comida lujosa y copas de oro y plata.

Sin embargo, tuvieron que dejar parte de su cultura atrás por culpa de la llamada “Gran Migración”. Un movimiento masivo de pueblos germánicos hacia el territorio romano que ocurrió aproximadamente entre los años 376 y 476 d.C.

La Gran Migración tuvo un gran impacto en la historia europea, ya que debilitó al Imperio Romano y, de este modo, los hunos se ganaron una reputación sanguinaria.

Sin embargo, la intención de estos nómadas no era conquistar Roma (en un principio). Lo que buscaban era tierras para asentarse. 

Fue su líder más célebre, Atila, quien consolidó a los hunos como guerreros nómadas y sanguinarios entre el año 380 d.C. y el 420 d.C.

Atila el Huno y los 40 años de guerra en Europa

La moneda de Atila, al más puro estilo de las monedas hindúes / Créditos: Red Historia

Atila era más ambicioso que los gobernantes hunos anteriores, por lo que un buen día decidió convertirse en el único gobernante de Europa.

Dirigió a los hunos por gran parte del continente, incluida Galia (la actual Francia) y Tracia (parte de lo que ahora es Bulgaria, Turquía y Grecia). Ahí consolidó un gran imperio que mantuvo intacto únicamente por la fuerza de su propia personalidad. 

No había ningún ejército con experiencia que pudiera hacerle frente. Esto debido a que los guerreros a caballo de Atila podían cambiar rápidamente de posición durante la batalla. Lo que les permitía atacar con más rapidez y defenderse de los ataques sorpresa.

Sin embargo todo cambió cuando Atila se casó con su nueva esposa en el año 453 d.C., y falleció durante la noche de bodas.

Sin su líder, los hunos dejaron de ser guerreros nómadas para convertirse nuevamente en una coalición de pueblos. Aunque la competencia entre las diversas facciones de hunos acabó definitivamente con este pueblo en el año 454 d. C.

Quizás la palabra «bárbaros» encaje con los hunos, pero definitivamente eran mucho más que guerreros y sanguinarios. 

Referencias:

Who were the Huns, the nomadic horse warriors who invaded ancient Europe? https://www.livescience.com/the-huns 

¿Quiénes fueron los implacables guerreros dirigidos por Atila el Huno? https://www.nationalgeographic.es/historia/2019/09/quienes-fueron-los-implacables-guerreros-dirigidos-por-atila-el-huno 

137 ancient human genomes from across the Eurasian steppes https://doi.org/10.1038/s41586-018-0094-2

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