Ahora que el agua alcalina se ha puesto de moda, es común escuchar cosas como que un “cuerpo alcalino es más saludable que un cuerpo ácido”. Pero ¿qué tan ciertas son estas afirmaciones?
Primero aclaremos algo, cuando hablamos de “agua alcalina” no nos estamos refiriendo a una nueva marca o sabor. La alcalinidad es el nivel de pH (potencial de hidrógeno) que tiene el agua, y es lo que determina qué tan ácida es en una escala de 0 a 14. Por lo tanto, el agua alcalina son todas aquellas versiones de agua embotellada cuyo pH es superior a 7.
Dicho esto, existen muchos artículos que hablan sobre cuánto favorece el consumo de agua alcalina al cuerpo. Por ejemplo, ayudando a eliminar las toxinas, previniendo enfermedades gastrointestinales o neutralizando la acidez gástrica. Sin embargo, no existen evidencias científicas que respalden tales afirmaciones.
Y eso es lo que preocupa seriamente a los médicos, pues el agua alcalina no parece ser mejor que el agua corriente. Solo más cara.
La realidad sobre el agua alcalina

El agua embotellada que se vende actualmente como agua alcalina suele tener nutrientes agregados para lograr un mayor pH. Con lo cual es un agua alcalina “artificial”.
Los fabricantes usan un proceso llamado electrólisis para separar la molécula de agua en componentes ácidos y alcalinos. Los ácidos se extraen para su posterior reciclaje, lo que hace que aumente el pH del agua hasta llegar a una puntuación de 10. Un porcentaje que ni siquiera tiene el agua naturalmente alcalina que se recoge en manantiales naturales.
Para algunos defensores de la vida saludable, mientras más pH haya en el agua alcalina, mayores serán los beneficios que reporte al cuerpo.
Pero tal afirmación todavía está bajo investigación científica, pues la electrólisis no agrega minerales importantes como el magnesio o el calcio que sí están presentes en el agua alcalina natural.
¿Un cuerpo menos ácido es mejor?
Hasta ahora, la ciencia solo ha demostrado que este tipo de agua embotellada posee una cantidad excesiva de pH. Lo cual no es precisamente bueno a corto plazo, ya que cualquier cambio extremo en el pH, ya sea ácido o alcalino, puede ser peligroso para el cuerpo.
Nuestros pulmones y riñones ya hacen un excelente trabajo regulando la acidez y la alcalinidad. Es por ello que el pH estándar se mantiene en un rango de 7,35 a 7,45 sin necesidad de consumir suplementos alcalinos.
Si forzamos un cambio extremo en este valor, el cuerpo tendrá que trabajar rápidamente para compensarlo. Con lo cual puede que el agua alcalina ocasione un mayor desgaste en el sistema urinario.
“Una orina más alcalina aumenta las posibilidades de una infección bacteriana. Por lo tanto, hay una fuerte razón para asegurarse de que la orina se mantenga más ácida que alcalina”.
Michael Daignault, médico en el Hospital de Los Ángeles
Además, investigaciones anteriores han demostrado que el pH del estómago es extremadamente ácido, entre un 1,5 y un 3,5. Y dependemos de que así se mantenga para descomponer las proteínas, virus y bacterias que llegan al cuerpo. Por lo tanto, alcalinizar el estómago puede ser problemático, y causar desde calambres hasta hinchazón.
El agua alcalina hidrata más que el agua potable pero no lo suficiente

Otra gran afirmación que se hace sin ninguna valoración científica es que “el agua alcalina hidrata más el cuerpo”.
Si bien es cierto que el agua alcalina con alto pH puede reducir la viscosidad del cuerpo en un 6,3%, mientras que el agua normal solo llega al 3,36%, el porcentaje de hidratación tampoco es significativo.
Hay ensayos clínicos que demuestran que la adición de electrolitos y otros minerales al agua potable es una solución mucho más efectiva después de un entrenamiento particularmente extenuante. Por lo tanto, esta pseudociencia que han inventado los defensores del agua alcalina no es más que un concepto atractivo: la idea de tener un cuerpo menos ácido.
Sin embargo, si realmente queremos reducir la acidez estomacal, la opción más segura sería disminuir el consumo de carne, queso, cereales y pescado, que conducen a un exceso de carga ácida.
Los beneficios del agua alcalina todavía deben pasar por muchas pruebas antes de justificar su efectividad.
Referencias:
Effect of electrolyzed high-pH alkaline water on blood viscosity in healthy adults https://doi.org/10.1186/s12970-016-0153-8
Alkaline water: Should you be splurging to make your body less acidic? https://medicalxpress.com/news/2022-07-alkaline-splurging-body-acidic.html
Alkaline Water: Benefits and Risks https://www.healthline.com/nutrition/the-alkaline-diet-myth