Hay algo que las personas no deben olvidar hoy en día: todo lo que hagas o digas en las redes sociales puede ser usado en tu contra. Y sí, eso significa ser despido gracias a una publicación en redes sociales. Si les cuesta creer esto, solo recuerden lo que ocurrió con Gina Carano, la actriz de “The Mandalorian” que fue despedida gracias a unos post que hizo en sus redes sociales sobre su apoyo a Trump y su molestia hacia el uso de los cubrebocas. Eso le costó a Carano su papel como Cara Dune y futuro con Disney. ¿Y crees que esto no le podría pasar a una persona común con un trabajo normal? Sigue leyendo y te enterarás de más.
Motivos por los que las personas han sido despedidas debido a una publicación en redes sociales
Se han publicado cerca de 312 artículos de noticias sobre personas que han sido despedidas debido a una publicación en las redes sociales. Estas son algunas de las razones y noticias que llevaron a algunas personas a quedarse sin trabajo:
- En uno de esos artículos, se señala que un maestro fue despedido después de que se declararon bisexual en Instagram.
- También había historias sobre publicaciones realizadas por otros, tales como videos de policías que se involucran en perfiles raciales.
- El racismo fue la razón más común por la que se despidieron a las personas en estas noticias, un 28 % de las historias estaban relacionadas con el racismo.
- En las historias también estuvieron involucradas otras formas de comportamiento discriminatorio, tales como la queerfobia y la misoginia (7%); conflicto laboral (17%); contenido ofensivo como “chistes malos” y publicaciones insensibles (16%); actos de violencia y abuso (8%); y “contenido político” (5%).
- También había noticias enfocadas en casos de personas despedidas de trabajos públicos. Entre estas estuvieron policías/ aplicaciones de la ley (20 %), maestros (8 %), trabajadores de los medios de comunicación (8 %), profesionales médicos (7 %) y trabajadores del gobierno (3 %). Así como trabajadores en funciones de servicios como hospitalidad y minorista (13%).
Todo esto nos demuestra que las redes sociales son un arma de doble, pero también hace que nos preguntemos cosas importantes sobre la privacidad, las prácticas comunes de recursos humanos y cómo los empleadores deberían usar las redes sociales para tomar decisiones sobre su personal.
¿Hasta qué punto debe respetarse la privacidad de los empleados?

A veces solo creemos que debemos aceptar que algunas de nuestras publicaciones, si no le gusta a un empleador, podría costarnos el empleo. Pero, ante esto, deberíamos preguntarnos hasta qué punto los empleadores y los gerentes de reclutamiento deben respetar la privacidad de los empleados. ¿En qué punto puede considerarse justo un despido gracias a una publicación?
Para hallar alguna respuesta a esas interrogantes, debemos tomar en cuenta estos escenarios:
- Las redes sociales son útiles para hacer que policías y políticos rindan cuentas por lo que dicen y hacen. Esta puede ser una herramienta valiosa para la democracia y la sociedad.
- Sin embargo, ¿qué pasa cuando la gente común pierde su trabajo porque es parte de la comunidad LGBTQ+, publica una foto de sí misma en bikini o porque se queja de los clientes en espacios privados? Aquí el límite entre la vida profesional y la privada empieza a difuminarse.
Y es que los smartphones, correos electrónicos, el trabajo desde casa, los mercados laborales altamente competitivos y el entrelazamiento de “trabajo” con “identidad” ayudan a desdibujar esa línea.
Muchos trabajadores se ven obligados a desarrollar sus propias estrategias y tácticas para mantener privada su vida personal. Algunos escogen no ser amigos o seguir a compañeros de trabajo en algunas redes sociales. Hecho que a veces puede crear tensión, pero es la única manera que encuentran muchos.
De hecho, incluso cuando se obtiene alegría y satisfacción del trabajo, es necesario que se respeten algunos límites.
Es imperativo que los empleadores, trabajadores de recursos humanos y gerentes reflexionen sobre los límites entre la vida profesional y la vida personal. Esto nos hace ver que el uso de las redes sociales en las decisiones de empleo puede ser más complicado de lo que parece.
Un ‘currículum oculto de vigilancia’
¿Qué es un currículum oculto de vigilancia? Este ocurre cuando las personas se sienten monitoreadas por los empleadores cuando usan las redes sociales. Dicha dinámica, especialmente para los jóvenes, puede ser dañina.
Este tipo de métodos solo sirven para crear ciudadanos/empleados obedientes. Todos se ven empujados a cuidar cada cosa que publican en sus redes sociales y siempre bajo el miedo de ser despedido.
Por otro lado, las redes sociales también ayudan a revelar las violaciones del poder. Aquí se ha llegado a exponer el mal comportamiento, la mala conducta, el racismo, la misoginia, la homofobia, la transfobia y otras formas de intolerancia, acoso y violencia.
¿Qué quiere decir todo esto? Pues que esa vigilancia tiene un lado bueno y malo: es invasiva en algunos casos, pero también posibilitadora de la justicia, la rendición de cuentas y la transparencia en otros escenarios.
Y es que las redes sociales pueden ser una herramienta efectiva para que las personas encuentren trabajo y los empleadores contraten empleados. Quizás solo se trata de conseguir el equilibrio entre el uso de las redes sociales para hacer que las personas rindan cuentas y el riesgo de invadir la privacidad de las personas. Todo depende del contexto, por supuesto.