Hace 3000 años, Aristóteles afirmó que ”el hombre es un animal racional”, que prefería analizar las cosas antes que actuar irracionalmente. Desde entonces, el ser humano es visto como una criatura superior en inteligencia y raciocinio, por no dejarse llevar por sus instintos. Pero es importante que tengamos claro algo: no todos los seres humanos son iguales, ni todas las decisiones son racionales.
Cuando se trata de teorías conspirativas o amenazas peligrosas, muchas personas suelen dejar la probabilidad matemática a un lado para apoyarse en otro gran recurso humano: la retórica. Es decir, usan las historias y las anécdotas para decidir si algo es bueno o malo. Lo que muchas veces puede ser peligroso.
La probabilidad matemática no va bien con los videojuegos y las hamburguesas

Si leemos teorías sobre el área 51, de seguro encontraremos muy buenos ejemplos de retórica. Pero no es necesario irnos tan lejos para ver esta tendencia humana, pues incluso en el día a día podemos encontrar a personas que no siguen la probabilidad matemática y no son conscientes de eso.
Por ejemplo, en 1980 se hizo bastante popular en Estados Unidos la idea de que los jóvenes que jugaban “Calabozos y Dragones” eran más propensos al suicidio y al homicidio. Esto debido a que aparecieron en las noticias dos casos emblemáticos que “respaldaban” esa teoría:
- El primero, la historia de Irving Pulling, un jugador reconocido de juegos de rol que a los 17 años se suicidó tras regresar de la escuela secundaria de Hanover.
- Y el segundo, el caso de James Dallas Egbert, un prodigio que se matriculó en la Universidad de Michigan a los 16 años, y desapareció poco después de jugar Calabozos y Dragones.
Los padres estadounidenses desacreditaron al juego y le prohibieron a sus hijos jugarlo. Al final, buena parte de la población extranjera también comenzó a creer que el juego era peligroso, cuando en realidad todos estaban “racionalmente” equivocados. Después de todo, las estadísticas oficiales decían que, de los 360 suicidios juveniles ocurridos en 1980, solo 28 estaban vinculados a jugadores de Calabozos y Dragones. Por tanto, era una vinculación sin fundamento.
“Para 1984, 3 millones de adolescentes jugaban Calabozos y Dragones en Estados Unidos. Entonces, cuando miras la parte inferior de la fracción, Calabozos y Dragones fue, en todo caso, protector. Había tenido el efecto contrario”
Zimring, Thomas W. Tillack de la Universidad de Virginia
Más tarde, ocurrió un suceso parecido en una hamburguesería llamada Quarter Pounder, que promocionó su hamburguesa más deliciosa a un precio mucho más bajo de lo normal. Sin embargo, las personas en lugar de ver esto como algo positivo pensaron que su nombre, “la tercera libra”, hacía referencia a la calidad de la hamburguesa y no al precio. Con lo cual nunca la probaron.
Las anécdotas distorsionan la probabilidad de las cosas

El científico y crítico matemático James Zimring asegura que muchas personas no comprenden la probabilidad matemática de las cosas. Por tanto, suelen guiarse más por su parte social que por su lado racional cuando tienen que decidir si algo es bueno o malo.
Preferir la evidencia anecdótica en lugar de esperar o buscar datos estadísticos no siempre es algo negativo. De hecho, nos ayuda a tomar decisiones mucho más rápido para que podamos huir de los problemas inminentes como la lluvia, las explosiones o los choques automovilísticos.
Sin embargo, el problema de esta tendencia es que no se puede decidir cuándo usarla. Las personas que son propensas a ignorar la probabilidad matemática suelen hacerlo siempre, por lo que terminan diciendo y haciendo cosas precipitadas.
Es por esto que vemos a diario personas que dicen que todos los videojuegos son peligrosos para el cerebro de los niños. O quienes creen que el Rock y el Heavy Metal son satánicos, cuando toda la evidencia que tienen es un testimonio.
Si bien podemos evitar esta tendencia humana de ignorar la probabilidad, intentemos al menos darnos cuenta si somos de los que ignoran la lógica para tomar decisiones sobre la comida, el ocio o la salud de nuestros seres queridos. Por el momento esa sería la mejor conducta que podríamos adquirir.
Referencias:
Dungeons & Dragons and Burgers: ‘Really Bad Outcomes’ When We Don’t Grasp Fractions https://news.virginia.edu/content/dungeons-dragons-and-burgers-really-bad-outcomes-when-we-dont-grasp-fractions