El antiguo molar, un diente que probablemente perteneció a una niña que vivió hace 164 000 años en Laos, es una nueva evidencia de que el misterioso linaje humano apodado los denisovanos.
El descubrimiento demuestra que los denisovanos vivieron en una amplia gama de entornos y latitudes. Además, que pudieron adaptarse a condiciones extremas.
Los estudios genéticos indican que los denisovanos estaban adaptados a climas fríos y de mucha altitud. Pero ahora también se descubrió que vivían en climas más cálidos y húmedos y a baja altitud.
Otros linajes humanos alguna vez vivieron en la Tierra, pero los únicos sobrevivientes son los Homo sapiens. Los parientes extintos más cercanos de los humanos modernos incluyen a los neandertales en Europa y Asia y los nuevos linajes denisovanos de Asia y Oceanía.
Investigaciones anteriores estimaron que los ancestros de los humanos modernos se separaron hace unos 700 000 años del linaje que dio lugar a los neandertales y los denisovanos. También se determinó que los ancestros de los neandertales y los denisovanos se separaron hace unos 400 000 años. Sin embargo, el análisis genético de los fósiles de estos linajes extintos reveló que permanecieron lo suficientemente cerca como para cruzarse con los humanos modernos.
Un diente antiguo de denisovano que trae respuestas
Muchos misterios giran entorno a los denisovanos. Hasta ahora, los investigadores han descubierto solo cinco fósiles vinculados con certeza a ellos. Entre los descubrimientos se hallan tres molares superiores, un hueso de un dedo y una mandíbula.
Además, Existe la posibilidad de que un cráneo descubierto en China también sea de denisovano, pero algunos científicos dicen que se trata de una nueva especie, Homo longi. Los científicos apodaron a este cráneo como el “Hombre Dragón”.
Asimismo se debate dónde vivían exactamente los denisovanos. Todos los fósiles desenterrados hasta la fecha provienen de Asia continental. Sin embargo, una evidencia genética anterior sugiere que las personas en Oceanía y las islas del sudeste asiático poseen herencia denisovana.
Ahora, el nuevo diente puede ser la primera evidencia fósil de denisovanos en el sudeste asiático.
Los científicos descubrieron el diente en 2018 en un sitio conocido como Cobra Cave en las montañas Annamite de Laos. La locación tiene una entrada ubicada a unos 34 metros (110 pies) sobre el suelo. La cueva de piedra caliza se denomina Tam Ngu Hao 2, y en ella se desenterraron fósiles antiguos de humanos modernos.

Análisis del molar
Los investigadores no esperaban encontrar un diente antiguo de denisovano en Laos, un molar que aún no había brotado del lado izquierdo de la mandíbula inferior. Dicha evidencia sugiere que perteneció a un niño de entre 3,5 y 8,5 años. Con los posteriores análisis se determinó que el molar tiene entre 131 000 y 164 000 años.
Al analizar las proteínas en el esmalte del diente, el equipo confirmó que era del género Homo. La ausencia de proteínas vinculadas con un cromosoma Y sugiere que el diente provino de una mujer.
Cuando los científicos compararon este molar con los dientes de otros homínidos, encontraron que se parecía al de los neandertales, pero con algunas variaciones. Los científicos sugirieron que su estrecha similitud física con un espécimen de Denisovan de China indicaba que el molar probablemente era de denisovano.
Haber encontrado un diente indica que los denisovanos también pasaron por el sudeste asiático. Además, los nuevos hallazgos abren la posibilidad de que los diferentes linajes humanos pueden haber coexistido, aunque esto aún no está del todo claro.
Los hallazgos darán paso nuevas investigaciones sobre los denisovanos, y también para comprender cómo llegó ese diente a la cueva donde lo encontraron.
Referencias:
Ancient tooth of mysterious Denisovan girl possibly found: https://www.livescience.com/possible-denisovan-tooth-found-laos