La carrera energética se ha avivado en esta última década. Ahora tenemos energía de fusión y una serie de hidrocarburos nuevos, que prometen ser más “limpios” y responsables con el medioambiente. Paradójicamente, estos solo pueden extraerse con técnicas hidráulicas altamente contaminantes. Como es el caso del fracking, un proceso industrial que está de moda actualmente, y al que se le asocia con deformaciones, problemas cognitivos y otros trastornos de salud infantil.
¿Qué es el “fracking”?

Esta frase no tiene una traducción al español, pero podemos considerarla como una suerte de “fractura”. Básicamente porque es una técnica industrial que busca fracturar trampas petrolíferas para extraer el gas de esquisto o lutita dentro de ellas. Un tipo de metano bastante común actualmente.
Puede que el término nos parezca muy novedoso, pero en realidad el fracking lleva realizándose desde los años 50. La diferencia está en que, en esa época, era un proceso de perforación exclusivo de Reino Unido, debido a la cantidad de maquinaria que necesitaba. Mientras que ahora se ha convertido en una moda al alcance de cualquier industria.
Lejos de lo que pueda parecer, el fracking es una técnica de extracción peligrosa, ya que utiliza agua a presión para perforar las rocas petrolíferas. Este agua contiene muchos aditivos químicos que empiezan a liberarse al ambiente una vez que el gas dentro la roca emerge.
En consecuencia, todo lo que esté cerca de su campo de acción, está irremediablemente expuesto al riesgo de contaminarse directamente por estos químicos, o indirectamente por las fugas de gas esquisto. Da igual si son animales, ciudades o bebés.
El fracking amenaza la salud infantil dondequiera que esté

Un estudio reciente de la Universidad de Rochester asegura que esta técnica de “fracking” afecta enormemente la salud infantil de los bebés recién nacidos, y la salud reproductiva de las mujeres en gestación. Esto debido a que la mayor parte de las sustancias químicas utilizadas en el proceso van a parar a los manantiales y aguas subterráneas de las grandes ciudades.
Las familias, ajenas a esta contaminación, le ofrecen el agua potable a sus hijos, impulsando así el desarrollo de enfermedades mortales. Tal es el caso del asma infantil, el cáncer o las deformaciones cardíacas, en niños; y los nacimientos prematuros y problemas cognitivos, en el caso de las mujeres en gestación.
Muchas empresas energéticas defienden que el fracking no puede ser la causa de estos problemas de salud, ya que las plantas se encuentran bastante alejadas de las grandes ciudades. Sin embargo, el mapeo reciente del Servicio Geológico de Estados Unidos asegura que, de los 19.000 pozos existentes, cerca de la mitad están a un metro de distancia de una fuente pública de agua.
“Cada nuevo pozo perforado dentro de un kilómetro de una fuente pública de agua potable se asoció con un aumento del 11-13% en la incidencia de nacimientos prematuros y bajo peso en bebés expuestos durante la gestación. Estos hallazgos indican los grandes costos sociales que tiene la contaminación del agua”.
Elaine Hill, profesora de obstetricia y ginecología de la Universidad de Rochester
Fracturas sociales irremediables en los niños y en el medio ambiente

Estudios anteriores ya habían asociado al fracking con la contaminación de las aguas urbana, mas no habían determinado cuán nocivo podría ser para la salud infantil de las futuras generaciones. Con lo cual este nuevo hallazgo sugiere que deberían reevaluarse los pros y los contras que ofrece esta técnica hidráulica.
Se dice que este proceso de extracción ha contribuido a la creación de empleo en las grandes ciudades, al ahorro económico y al consumo de energías más limpias.
Sin embargo, no existe una buena política ambiental que elimine las sustancias químicas que segrega antes de que se filtren en las aguas subterráneas. Mucho menos una regulación legal que castigue a las empresas energéticas que contaminan las aguas de esta manera. Así que el fracking parece que será una moda alarmante en el futuro, como comenta el periodista Luis Suárez de la BBC:
“A mí lo que me preocupa es que determinadas empresas multinacionales en Sudamérica se aprovechen de la falta de poderío de la administración y hagan más explotaciones afectando el medioambiente”.
Referencias:
Fracking near public water is bad for infant health https://www.futurity.org/fracking-pollution-public-water-infant-health-2724842/?utm_
Qué es el fracking https://www.bbc.com/mundo/noticias/2013/10/131017_ciencia_especial_fracking_abc_am