En algunas regiones del mundo la nueva ola de Covid-19 se está haciendo sentir, y también genera una variedad de respuestas en las personas. Para algunas, la nueva ola por ómicron genera total desinterés mientras que a otras las invade el asombro.
¿Por qué difieren las respuestas de las personas ante la nueva de Covid-19?
Según expertos, extirían dos razones principales por las que las personas reaccionan diferente a la nueva ola. Estas razones tienen que ver con factores psicológicos que influyen en cómo las personas responden de diferente manera a la misma situación.
Uno de esos factores tienen que ver con cuán probable creen que habrá un mal resultado. Es decir, si las personas piensan que hay más probabilidades de contraer Covid, entonces es más porbable que se asusten. Por lo tanto, estas buscarán la manera de protegerse del contagio.
El otro factor se relaciona con cuán malo puede llegar a ser ese resultado. Si las personas esperan grandes “costos” por infectarse, esto también puede afectar su respuesta. Cuanto mayor sea el costo anticipado, mayor será el miedo y la evitación.
Aunque las personas se enfrenten a una misma situación, siempre diferirán en la manera en la que reaccionen a ella. Esto a su vez afecta en su nivel de temor y su comportamiento.
Cómo influyó la variante Ómicron
El contexto ya no es el mismo desde que inició la pandemia. Ahora se conoce más sobre el virus y sus efectos. Muchas personas se contagiaron y se recuperaron con éxito. Además, la vacunación ayudó a que la enfermedad tenga niveles menos graves.
El hecho de que la variante ómicron sea menos grave que sus antecesoras hace que las personas cambien el costo anticipado de contraer Covid. Para algunos, infectarse con Covid puede parecer inevitable. Sin embargo, eso ya no evita que las personas estén fuera de casa.
También existe la posibilidad de que tras dos años de pandemia, el impacto de esperar infectarse y no hacerlo reduzca nuestra expectativa de infección, nuestro miedo y nuestra evitación.

“Aprendizaje de extinción”
La relajación de las restricciones y la reincorporación a las actividades previas a la pandemia pudieron haber provocado ansiedad en algunas personas. Pero con el tiempo, en ausencia de una catástrofe, nuestros temores disminuyen. A esto se conoce con el nombre de “aprendizaje de extinción” y es la base de la terapia de exposición, un tratamiento estándar para la ansiedad.
Sin embargo, si alguien es hospitalizado inesperadamente con Covid, puede aumentar su creencia en la probabilidad y el costo de contraer la enfermedad. Después de la recuperación, estas personas podrían volver a sentir miedo y por lo tanto eviten la exposición a más riesgos.
Las dos respuestas más comunes a la nueva ola de Covid-19
Últimamente el Covid ya no domina las noticias. Esto pudo hacer influido en la reducción del miedo relacionado con la infección. A la vez explicaría por qué las respuestas de las personas a la nueva ola de Covid-19 también hayan cambiado.
Antes, las personas se sorprendían por todo lo relacionado con el Covid. Esta era una respuesta común en el inicio de la pandemia, cuando no sabíamos nada del virus y tampoco sabíamos cuándo llegarían las vacunas. En ese entonces, evitar el riesgo tenía sentido.
Sin embargo, en esta etapa de la pandemia, algunas personas pueden ser propensas a sobrestimar la probabilidad de contraer Covid y sus consecuencias. Sin tener en cuenta el riesgo real.
Según los expertos, es probable que estas personas busquen y presten mayor atención a la información negativa o amenazante que les rodea. Este es un proceso conocido como sesgo atencional y está relacionado con la ansiedad.
Las personas con esta característica también son más propensas a evitar situaciones que provoquen ansiedad. Esto evita oportunidades para ajustar sus expectativas sobre la posibilidad de contraer Covid y el costo. Lo que crea un ciclo continuo de miedo y evitación que no se disipa con el tiempo.
¿Cómo evaluar este tipo de respuesta?
Una respuesta racional es aquella que refleja con precisión tanto la probabilidad como el costo de una consecuencia negativa. La amenaza por Covid puede variar entre los individuos. Por lo tanto, es importante evaluar con precisión qué significa una amenaza para ti.
Si la amenaza es alta, puedes justificar una mayor precaución para evitar contraer el virus mediante el distanciamiento físico, el uso de mascarillas o la reducción del contacto social.
Alternativamente, si la amenaza es baja, puedes requerir menos precaución.
Aquí hay algunos pasos prácticos para ayudarte a determinar con precisión la probabilidad y el costo de contraer Covid y alinear tu respuesta en consecuencia.
En primer lugar es importante evaluar la evidencia. Es decir, mantenerte informado de fuentes confiables sobre las tasas de infección. Además conocer las tasas de enfermedades graves que requieren hospitalización.
En segundo término, hablar con tu médico de cabecera sobre los riesgos personales y cómo manejarlos.
Por último, si tu miedo al Covid tiene un impacto negativo en tu vida, busca apoyo profesional para controlar tu salud mental. En estos casos, la terapia cognitiva conductual es una psicoterapia que enseña a las personas cómo evaluar la amenaza y reducir la evasión.
Referencias:
The next COVID wave is here. Why for some of us it’s OMG and for others it’s meh: https://theconversation.com/the-next-covid-wave-is-here-why-for-some-of-us-its-omg-and-for-others-its-meh-180338