El embarazo es uno de los períodos más delicados. Entre muchos motivos, porque se dice que cada mujer lo vive de manera diferente, razón por la cual no existen certezas universales. Sin embargo la Universidad de Stanford sí parece haber hallado un patrón en el caso de las familias con “dos madres”, pues cerca del 46% de estas parejas maternas experimentan hemorragias durante el embarazo.
Los embarazos no son sencillos para las parejas maternas

El estudio de casi 1,5 millones de nacimientos encontró que las mujeres que tenían parejas del mismo sexo eran un 40% más propensas a sufrir problemas de salud que las parejas tradicionales. Principalmente trastornos hipertensivos, preeclampsia leve y grave, hemorragias, y partos prematuros. Todos ellos factores de riesgo que pueden poner en peligro la vida del bebé y de la mujer embarazada.
Los científicos realizaron una nueva medición de los nacimientos tres años más tarde y se dieron cuenta que esta disparidad era constante. Mientras que las mujeres con parejas masculinas daban a luz a cerca de 1.430 bebés al año, las mujeres con parejas maternas solo llegaban a lograr 257 partos exitosos tras el embarazo. Lo que implicaba que estas parejas tenían problemas para formar una familia.
¿Por qué es tan difícil que las familias con “dos madres” den a luz?
Los investigadores estudiaron posibles factores que podrían impulsar estos problemas de salud entre las parejas de dos madres, como la edad de la mujer, la raza/etnicidad, el índice de masa corporal, entre muchos otros. Sin embargo no lograron encontrar un factor determinante que propicie estas enfermedades más allá de la genética. Algo que no depende de su orientación sexual en absoluto.
“Investigaciones anteriores han demostrado que lesbianas y bisexuales tienen tasas elevadas de afecciones cardiovasculares, hipertensión y diabetes, pero no hallamos diferencias significativas entre estos valores y el de las parejas con madre y padre. No parece haber una razón biológica”.
Stephanie Leonard, ginecóloga en la Universidad de Stanford
Esto los llevó a pensar que debía existir una factor que estuviera afectando la salud del bebé, y efectivamente lo hallaron en la atención médica que se les daba a estas parejas.
Los prejuicios durante en embarazo pueden ser mortales

De acuerdo con el análisis de Stanford, las mujeres con parejas maternas están recibiendo una atención médica precaria durante el embarazo, y posteriormente, por parte de las enfermeras y cuidadoras de los centros médicos.
Generalmente estos profesionales están acostumbrados a llevar una dinámica de “madre” y “padre”, en la que solo deben preocuparse por el bienestar de la mujer. Sin embargo, cuando se suma otra “madr”e a la mezcla esta dinámica se rompe y aparecen las desigualdades en el trato.
En algunos casos por culpa de los prejuicios hacia las lesbianas y la comunidad LGBTQ+. En otros por simple desconocimiento. Pero, independientemente del caso, todos acaban perjudicando la salud de la mujer y las posibilidades de que esta dé a luz a un bebé sano.
Afortunadamente, no todos los hospitales o médicos son así. Por eso estos expertos buscan promover, con su estudio, un mejor trato hacia las mujeres con parejas maternas que desean tener hijos. Esto mediante una consideración fundamental:
“Las lesbianas y bisexuales embarazadas son iguales a cualquier otra mujer. Por tanto, necesitan las mismas ecografías, análisis de sangre y atención médica de calidad”.
Ginecólogos de la Universidad de Stanford
Referencias:
Two-Mom families face major disparities in pregnancy outcomes https://www.futurity.org/mothers-partners-adverse-pregnancy-birth-outcomes-2
Sexual and/or gender minority disparities in obstetrical and birth outcomes https://doi.org/10.1016/j.ajog.2022.02.041