Entre los manglares de Grande-Terre, una de las Antillas del Mar Caribe, se esconde la bacteria más grande reportada hasta la fecha, con 2 cm de amplitud y una morfología similar a la de una cuerda.
Un descubrimiento que le debemos a los investigadores del Instituto de Tecnología de Kyushu en Japón, y que no deja indiferente a nadie dentro de la comunidad científica; ya que estamos acostumbrados a pensar en las bacterias como organismos diminutos que requieren de un “huésped” para sobrevivir, y no como monstruos del tamaño de un insecto.
Una bacteria que se hace notar no solo por su tamaño
Sin embargo, su tamaño y forma no son las únicas cualidades que hacen resaltar a la bacteria más grande del mundo entre su comunidad.
Los científicos aseguran que este microbio lleva todo su ADN dentro de una bolsa membranosa, unida a la pared celular. Esto ayuda a que su núcleo se mantenga protegido de cualquier agente externo. Algo de lo que carecen sus parientes bacterias y arqueas, cuyo material genético flota libremente dentro de sus células.
“Tienen células más complejas que contienen un núcleo y otros orgánulos unidos a la membrana. Es como si fuera el punto medio entre las procariotas y eucariotas”.
Kazuhiro Takemoto, biólogo computacional del Instituto de Tecnología de Kyushu
Además, también lleva una segunda bolsa llena de agua, que ocupa más del 70% del volumen total de su cuerpo según comentan los científicos. Esta bolsa llena de agua aplasta todo el contenido de la célula contra las paredes de la bacteria, lo que le ayuda a eliminar toxinas con facilidad.
¿Por qué es más grande que el resto?
De momento se desconoce si esta bolsa de agua es la que ha impulsado su crecimiento, pero los investigadores afirman que es lo más probable. Esto debido a que hace un par de años se encontró en el Golfo de México otra bacteria masiva, la más grande hasta hace poco, que también llevaba el mismo tipo de bolsa llena de agua.
Es muy posible que esta bacteria recién descubierta y esa proteobacteria llamada «perla sulfurosa de Namibia» pertenezcan a la misma familia de microbios. En otras palabras, al grupo de gram-negativos, que viven en los sedimentos oceánicos de la plataforma continental terrestre.
Si esto logra comprobarse, entonces es posible que su tamaño varíe unos 5 milímetros con cada comida, como lo hace la perla sulfurosa de Namibia. Aunque, aún así, seguirá siendo la bacteria más grande de su grupo, capaz de ser vista sin necesidad de utilizar un microscopio.
¿Una bacteria masiva o el eslabón perdido de las bacterias?

Los investigadores tienen pensado seguir estudiando a esta bacteria en su hábitat natural, para ver si presentan algún cambio con el tiempo. Principalmente porque creen que podría ser un eslabón perdido en la evolución de las células que dieron la vida a las especies hace millones de años.
Sin embargo, para la comunidad científica esa posibilidad es muy remota, al igual que el hecho de que la bacteria más grande del mundo se vuelva una amenaza, como lo sugieren los investigadores de Japón.
Referencias:
Biggest bacterium ever discovered amazes scientist with its complexity https://www.livescience.com/biggest-bacterium-ever-discovered-complex