Hace casi 10 años, la Administración de Alimentos y Medicamentos aprobó la creación de un «marcapasos cerebral». Este dispositivo pretendía inicialmente monitorear los estímulos que provocaban las convulsiones epilépticas, pero actualmente se ha convertido en un aliado indispensable para aliviar los síntomas de los trastornos convulsivos.
Como un marcapasos para el corazón, pero para el cerebro

Podemos pensar en este marcapasos cerebral como una versión del marcapasos que utilizan los pacientes con enfermedades cardiovasculares ya que, de hecho, funcionan de manera similar. Ambos se implantan con electrodos en la zona afectada y monitorean las pulsaciones del órgano para detectar si hay alguna anomalía.
A simple vista, la mayor diferencia entre ambos es que uno se implanta en el corazón y el otro en el cráneo, hasta que la persona decida apagarlo o quitárselo.
Sin embargo, la Epilepsy Foundation asegura que este dispositivo ofrece muchas más ventajas de las que parece, ya que también estimula al cerebro para detener la convulsión en su punto más temprano, cuando todavía no ha dañado ninguna célula neuronal. Esto a través de pequeñas descargas eléctricas, que no son perceptibles ni dolorosas para la persona.
Un dispositivo que cura las ondas cerebrales accidentalmente
Aunque en un inicio no se pensó que las descargas que utiliza este marcapasos cerebral para medir las pulsaciones tuvieran un efecto “supresor”, lo cierto es que han resultado sumamente eficaces para prevenir las convulsiones.
Ejemplo de eso, lo tenemos en las grabaciones almacenadas por estos dispositivos. En ellas se vé claramente como el 90% de los pacientes han reducido el número de convulsiones diarias a casi la mitad.
«Hay un algoritmo en el chip de computadora que está en el dispositivo que detecta cuando las pulsaciones son anormales. Esto para aumentar la frecuencia de las descargas durante un par de milisegundos. Los pacientes no pueden sentirlo y no causa dolor».
Dr. Zimmerman, neurocirujano del Hospital Mayo Clinic en Florida
En este sentido, los marcapasos cerebrales podrían ser una terapia alternativa para aquellos pacientes con epilepsia que no responden a los medicamentos anticonvulsivos, ni a la cirugía convencional.
¿Es seguro implantar un marcapasos en el cerebro?

A lo largo de la década, diversos estudios se han centrado en determinar qué tan seguro es usar un marcapasos cerebral, pero al final todos sugieren lo mismo: La estimulación cerebral no producen efectos secundarios.
De hecho, algunos expertos han concluído que las estimulaciones redujeron en un 20% el riesgo de muerte súbita por epilepsia, por lo que todo parece indicar que estos dispositivos tienen un gran potencial a futuro.
Sin embargo, los científicos aclaran que no deben verse como aparatos milagrosos, ya que no todas las personas responden al tratamiento de la misma forma. Es posible que algunos disfruten de un año sin convulsiones, como también es probable que otros solo experimenten un par de meses de tranquilidad.
Pero puede que en un par de años la estimulación con estos marcapasos sea clave para acabar definitivamente con la epilepsia.
Referencias:
What is a ‘brain pacemaker?’ https://medicalxpress.com/news/2022-02-brain-pacemaker.html
Responsive Neurostimulation (RNS) https://www.epilepsy.com/learn/treating-seizures-and-epilepsy/devices/responsive-neurostimulation-rns
What is Responsive Neurostimulation? https://www.epilepsy.com/article/2019/4/what-responsive-neurostimulation