Todos sabemos que el cerebro humano está compuesto por dos grandes masas encefálicas y rugosas denominadas “hemisferios cerebrales”, uno derecho y otro izquierdo, en donde se concentran nuestras funciones intelectuales. Pero alguna vez nos hemos preguntado ¿por qué en lugar de un hemisferio son dos?
Si bien nosotros quizás no lo hemos hecho, los científicos sí. Por eso, en esta ocasión, te contaremos todo lo que se ha especulado acerca de esta forma de «nuez» tan característica que posee nuestro cerebro.
Mitos sobre la bilateralidad de los hemisferios

A pesar de que el cerebro fue uno de los primeros órganos conocidos por el hombre, su estudio no parecía ser una prioridad para el Antiguo Mundo. De hecho, la primera investifgación estudio relacionada con los hemisferios cerebrales se produjo en la década de los 60. Momento para el cual se desarrolló una nueva técnica para el tratamiento de personas con epilepsia refractaria.
Esta técnica consistía en cortar el cuerpo calloso que conecta ambos hemisferios para evitar que el ataque epiléptico saltara de uno al otro. Una idea que podría parecer absurda, pero que acercó a la ciencia a un descubrimiento mayor: ambos hemisferios seguían funcionando aún tras su “separación”; lo que parecía indicar que, más allá de su forma, existía una división real del cerebro.
Desde ese momento, la comunidad científica comenzó a orientar sus investigaciones hacia esta masa encefálica, desarrollando teorías que bien podrían ser consideradas mitos en la actualidad por la falta de pruebas concluyentes. Entre todas, tres son las más emblemáticas.
Somos simétricos y por tanto tenemos un cerebro simétrico
Una de las primeras teorías en relación a este tema y, sorpresivamente, más apoyadas por la comunidad científica actualmente es la de la simetría anatómica; ya que involucra al campo matemático además del biológico.
Básicamente plantea que los seres vivos son simétricos con respecto al plano sagital, es decir, a la mitad de un cuerpo. Por tanto, sus estructuras orgánicas se repiten entre una parte y otra. Esto a fin de mantener el equilibrio del cuerpo y controlar de forma independiente todas sus funciones.
La razón por la que esta teoría es la más aceptada no es otra que la evidencia fisiológica, pues los seres humanos poseemos una gran cantidad de partes simétricamente duplicadas como los ojos, los brazos o las piernas, que son controlados por cada hemisferio respectivamente.
Un producto más de la casualidad

Otro estudio realizado en 1983 sobre los patrones cerebrales indica que esta división fue ocasionada por factores de riesgo genéticos, biológicos y ambientales independientes. En otras palabras, los hemisferios cerebrales y el ordenamiento de sus funciones se dió de manera aleatoria, como un fenómeno evolutivo.
La evidencia principal que sustenta esta teoría proviene de estudios previos. A través de los cuales se examinó cómo ciertos pacientes no mostraban fallos en sus procesos de habla y escritura. Esto a pesar de haber recibido una lesión cerebral severa en el hemisferio izquierdo, «supuestamente» responsable de tales procesos cognitivos.
El cerebro necesitaba conversar consigo mismo
Quizás la idea más curiosa sobre la división del cerebro fue la aportada por el psicólogo Julian Jayne en 1976, en su libro “The Origin of Consciousness in the Breakdown of the Bicameral Mind”.
Para él, la bifurcación de hemisferios cerebrales fue producto de un proceso evolutivo relacionado con la necesidad de comunicar conceptos e ideas. Esto debido a que la codificación de impulsos que nos permite entender y responder a otros solía ser un proceso lento entre los hombres primitivos, que requería de la acción conjunta del cerebro.
Por tanto, a medida que la comunicación se volvió una tendencia popular, el cerebro optó por «romper» las conexiones callosas entre los hemisferios para agilizar las comunicaciones con otros y consigo mismo. Una división natural que contribuyó a diferenciar hoy los hemisferios de acuerdo a sus funciones, en lado analítico y lado del lenguaje.
De la forma al funcionamiento cerebral

Independientemente de su origen, tenemos dos hemisferios cerebrales. Por una parte tenemos al hemisferio izquierdo, encargado del pensamiento racional y los procesos cognitivos relacionados con el habla, la percepción y la memoria. Por otra tenemos al hemisferio derecho, el lado intuitivo de la mente y en donde predominan las creencias, los pensamientos a futuro y la creatividad.
Características que si bien han sido comprobadas a través de estudios científicos, se han desvirtuado con el pasar de los años. Ahora, la mayoría de las personas cree que existe un predominio de un hemisferio sobre otro en la persona, es decir, “personas de cerebro izquierdo” o “personas de cerebro derecho”.
Una presunción que resulta exagerada para la ciencia, ya que impone la idea equivocada de que una persona no podrá desarrollar aptitudes que no sean las de su hemisferio predominante. Por ejemplo, una persona con un hemisferio derecho “más desarrollado” nunca será capaz de aprender a tocar un instrumento o a pintar un cuadro.
¿No nos creen? En los últimos años se ha acentuado en los medios digitales esta tendencia, por lo que una simple búsqueda sobre los “hemisferios cerebrales” puede arrojarnos suposiciones incluso más absurdas, como que el cristianismo es una religión de cerebro derecho, o que los mejores empleados son los que usan más su lado izquierdo del cerebro.
Entonces… ¿Es bueno tener dos hemisferios cerebrales?

Si dejamos de lado estas presunciones, podríamos ver que la bilateralidad de los hemisferios cerebrales es una bendición para nuestra mente, ya que nos aporta ciertos beneficios “especiales” para afrontar el día a día, según el Instituto de Neurociencia Cognitiva de la Universidad Ruhr en Alemania.
Uno de estos beneficios es la capacidad de realizar una tarea con cierta rapidez, dado a que tenemos un hemisferio encargado dedecado a ella, lo que facilita su desarrollo. Cualidad que nos permite además el desarrollo de múltiples tareas a la vez, pues mientras esa zona en concreto está trabajando las otras son libres para desempeñarse en otras áreas. Una dinámica que realizamos a diario cuando, por ejemplo, hablamos con alguien mientras estamos viendo un video en redes sociales.
Así mismo, la división de los hemisferios cerebrales favorece el desarrollo de habilidades cognitivas, en igualdad de condiciones. Esto debido a que casi cualquier tarea requiere que utilicemos ambos lados del cerebro. Por ejemplo a la hora de hacer una noticia el hemisferio izquierdo se activa para ayudarnos a redactar, pero en paralelo con el hemisferio derecho también para ayudarnos a distribuir la información.
En consecuencia, este trabajo continuo y dual de los hemisferios mejora nuestras capacidades de lectura, comprensión, memoria y comunicación, en todos los sentidos y entre todas las especies.
Importante: La bilateralidad cerebral no es exclusiva

Los seres humanos tenemos la tendencia a pensar que somos únicos y superiores a otras especies, cuando no es así. Por ejemplo, hasta los años 70 los científicos creían que la naturaleza bilateral del cerebro era única en los humanos, y es lo que había impulsado nuestro desarrollo como especie.
Sin embargo, estas consideraciones empezaron a cambiar durante el auge de los estudios experimentales. Momento para el cual se determinó que muchos animales presentaban también una bifurcación en el cerebro similar a la del ser humano, como perros, cerdos, gallinas o ratas.
Estudios actuales incluso sugieren que esta división de hemisferios cerebrales podría encontrarse también en el cerebro de pequeños invertebrados como las abejas o los gusanos. Así como en especies marinas como el delfín, quien además es considerado la especie más inteligente del mundo animal.
Gracias a estos hallazgos, los científicos han determinado que todos sus estudios previos sobre la razón de la biratelaralidad no pueden ser correctos. Principalmente porque el origen de la bifurcación tendría que ser común para todas las especies, pero muchos animales no son simétricos ni han desarrollado procesos comunicativos relevantes.
En este sentido, la ciencia aún no ha comprendido a plenitud la bilateralidad de su órgano cognitivo favorito… ¿Será producto de la evolución o de un sistema de compensación interno? De momento solo tenemos algo claro: existen dos hemisferios cerebrales, uno derecho y uno izquierdo, que seguiremos utilizando a lo largo de nuestra vida.
Referencias:
¿Por qué el cerebro tiene dos mitades? https://www.muyinteresante.es/ciencia/articulo/por-que-el-cerebro-tiene-dos-mitades-121494232619#:~
El mito del cerebro izquierdo y el cerebro derecho https://jralonso.es/2016/08/08/el-mito-del-cerebro-izquierdo-y-el-cerebro-derecho/
Why Your Brain Has 2 Halves https://www.livescience.com/58763-why-your-brain-has-2-halves.html
Ontogenesis of Lateralization https://doi.org/10.1016/j.neuron.2017.02.045
Hemispheric division of function is the result of independent probabilistic biases https://dx.doi.org/10.1016%2Fj.neuropsychologia.2009.03.005