Cuando pensamos en un espejismo, es muy probable que nos venga a la cabeza la típica imagen del oasis en el medio del desierto. Sin embargo, esta es tan solo una pequeña muestra de los trucos que puede jugarnos nuestra mente. Ahora, como un ejemplo más moderno de esto, nos topamos una curiosa ilusión óptica que nos ha hecho ver a un barco flotante que se movía muy por encima del nivel del mar.
En esta ocasión, el particular acontecimiento fue capturado en cámara por el transeúnte David Morris. Según este le comentó a The Guardian, se encontró por casualidad con esta particular ilusión mientras paseaba cerca de la coste en una aldea de Falmouth, en Cornualles, Reino Unido.
Morris relata que quedó “impactado” por la vista con la que se encontró al observar el horizonte. Y no sería para menos. Después de todo, tal como vemos en la fotografía que tomó, realmente pareciera que el enorme barco petrolero se encontrara flotando muy por encima del nivel del mar.
Espejismo superior: la ilusión óptica que nos hizo ver un barco flotante
Tenemos claro que, aunque la foto muestre claramente a un barco flotante, este no se trata de nada más que una ilusión óptica. Sin embargo, cabe preguntarse cómo puede generarse un efecto tan extraño y notable como este.

Para entenderlo, se lo ha denominado como “espejismo superior”. Este nace de un fenómeno meteorológico en el que una capa de aire caliente recubre a una de aire frío. Como sabemos, mientras más fresco este sea, mayor será su densidad también. Por lo que se vuelve más reflectante.
Debido a esto, las ondas de luz del sol no se mueven uniformemente a través de estas capas térmicas. La interacción entre los dos termina por empujar hacia abajo la luz en la capa fría, mientras que la caliente continúa reflectando en línea recta.
Como consecuencia, para un espectador como Morris, que observaba desde la distancia, podría parecer que el barco –en la capa de aire cálido– vuela sobre la superficie del mar. Sin embargo, lo que único que ocurre es una jugarreta de nuestro cerebro que intenta simplificar las emisiones de la capa más fría. Como resultado, recibe todo como si estuviera en “línea recta” y los reflejos del aire frío hacen parecer que hubiera más cielo, y no agua, bajo el barco.
El alcance de los espejismos superiores
Aunque para nosotros son una novedad, los marineros en realidad están acostumbrados a lidiar con los espejismos superiores. Por este motivo, la ilusión óptica de un barco flotante se convierte en algo cotidiano.
Debido a esto, también han desarrollado métodos que les permiten descubrirla rápido. Por ejemplo, cuando faltan detalles en esa “línea de horizonte” bajo el objeto flotante. En este caso, el barco petrolero no tiene colgando las amarras que debería si está fijo en el agua. De allí que se sepa que esa franja es solo un espejismo que engaña a nuestros ojos.
Como un extra, por los extraños juegos de reflexión y de luz, a veces el espejismo superior ayuda a los marineros a ver barcos que aún no están realmente en la línea del horizonte, sino que se encuentran más lejos. Por lo general, tienen algún detalle distorsionado, como ser particularmente grandes o tener curvaturas extrañas.
Según The Guardian, este tipo de fenómenos meteorológicos son más comunes en sitios como el Ártico, donde el aire cercado al mar siempre suele ser más frío. Sin embargo, recalcan que algunas veces –como esta– se puede producir en Reino Unido, pero que las condiciones meteorológicas para ello son poco comunes.
Extra: ¿Qué diferencia al espejismo del barco flotante del de los oasis del desierto?
Al inicio de la nota, comentamos que una de las ilusiones más icónicas es la de los oasis en el medio del desierto. Estas difieren fundamentalmente de una ilusión óptica como la del barco flotante ya que se presentan con un fenómeno meteorológico inverso.
Cuando una capa de aire relativamente frío pasa sobre otra capa de aire caliente muy cerca de la superficie del suelo, se crea ese particular reflejo que acostumbramos ver. A estos fenómenos se los conoce como “espejismos inferiores” y son los que dan origen a los pozos de agua falsos tan típicos de esta ilusión.
Dichos pozos aparecen también por un efecto de movimiento de la luz. Así como los espejismos superiores envían las ondas hacia abajo, los inferiores las disparan hacia arriba. De allí que se “refleje” en ellos un poco del cielo y que nuestra mente, tratando de simplificar la información, lo confunda con agua.