Lata de Coca-Cola, un contenedor en el que cabría todo el coronavirus del mundo.

Una sola lata de Coca-Cola podría contener fácilmente todas las partículas del coronavirus SARS-CoV-2, causante de la pandemia de COVID-19, que circula actualmente en nuestro mundo.

La extraña afirmación proviene de un matemático británico de la Universidad de Bath, Christian Yates, al que le pidieron que calcular el volumen total del patógeno para el programa More or Less de BBC Radio 4.

Estimaciones para calcular la cantidad de coronavirus en el mundo

Para este arduo y curioso trabajo, el matemático reconoció que trabajó en función de estimaciones, ya que a fin de cuentas es muy difícil saber con certeza cuántas partículas del coronavirus están en nuestro planeta.

En primer lugar, aún a estas alturas, muchos países no tienen suficientes pruebas para diagnosticar a su población. Asimismo, muchas personas prefieren no hacerse la prueba, por miedo a discriminación, o simple temor del personal de salud en estos tiempos; y, de ser positivos, de seguro habrán contagio a otros individuos que podrían repetir dicho patrón. En resumidas cuentas, ¡ni siquiera tenemos suficiente certeza del número real de infecciones en muchos países!

Asumió que los seres humanos son el reservorio más importante del coronavirus, omitiendo a los animales, y usó las estadísticas del sitio web Our World in Data para sus cálculos. De ahí extrajo que medio millón de personas dan positivo a la prueba de COVID-19 todos los días.

Mientras que las estimaciones del Instituto de Métricas y Evaluaciones de la Salud ha estimado que el número real de infecciones humanas diarias en todo el mundo supera los 3 millones. Pero, ¿cómo podrían entrar todas partículas del coronavirus en una lata de Coca-Cola?

Entre 1,000 millones y 100 mil millones de partículas de virus

Ahora bien, la carga viral de cada persona infectada depende de cuánto tiempo llevan enfermas, como muchos saben. Se cree que las cargas virales en la COVID-19 aumentan desde que se produce la infección y alcanzan su punto máximo unos seis días después de la infección. Desde entonces, empiezan a disminuir de manera constante.

También estimó que, de todas las personas infectadas ahora, las que se contagiaron ayer contribuirían poco al recuento total, mientras que las que se contagiaron un par de días antes sí tendrían un aporte significativo.

En cuanto al número de partículas de virus que lleva cada persona infectada, es aún más difícil saberlo. Pero un estudio no publicado hizo una estimación que resultó útil para Yates: las cargas virales máximas oscilan entre mil millones y 100 mil millones de partículas de virus.

Partiendo de todas estas estimaciones, sumó todas las contribuciones a la carga viral de cada una de las 3 millones de personas infectadas con el coronavirus, y llegó a la conclusión de que una lata de Coca-Cola sería suficiente para contenerlo.

El volumen de todo el coronavirus en el mundo cabe en una lata de Coca-Cola

«Encontramos que hay aproximadamente doscientos cuatrillones (2×10¹⁷ o doscientos millones de billones) de partículas de virus en el mundo en cualquier momento», escribió en su artículo en The Conversation.

La cantidad es sumamente grande, pero al estimar el volumen debemos tomar en cuenta también que no hablamos de algodón, sino de partículas extremadamente pequeñas, tanto que no podemos verlas a simple vista. Para tener una idea, el radio del SARS-CoV-2 es aproximadamente 1,000 veces más delgado que un cabello humano.

Tras aplicar la ecuación clásica de cálculo de volumen, el resultado del volumen del coronavirus fue 523.000 nanómetros³, el cual multiplicó por la gran cantidad de partículas calculadas previamente. Así obtuvo un volumen total de coronavirus en el mundo de 120 mililitros, lo cual entraría en una lata de Coca-Cola.

Referencia:

All the coronavirus in the world could fit inside a Coke can, with plenty of room to spare. https://theconversation.com/all-the-coronavirus-in-the-world-could-fit-inside-a-coke-can-with-plenty-of-room-to-spare-154226

Venezolana, ingeniera química, redactora y autodidacta.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *