Estos hermosos mamíferos marinos han captado nuestra atención por décadas. Nos han entretenido y maravillado con sus capacidades. Ahora, este martes, se conmemora el Día Internacional de los Delfines y, con un reciente estudio, tenemos la oportunidad de saber más de ellos.
Su inteligencia y habilidades han hecho que estos se destaquen entre muchos otros animales y que despierten particularmente nuestra atención. Actualmente, el poder compartir con ellos sigue siendo un deseo recurrente en muchos niños y también adultos.
Estas impresionantes criaturas han mostrado tener amplias capacidades de raciocinio, comunicación y aprendizaje. Ahora, este nuevo estudio publicado en Animal Behaviour también revela que son poseedoras de tipos de personalidades que pueden establecer paralelismos con las nuestras.
Los delfines del Golfo de Aranci
Para poder llegar a esta conclusión, el investigador Bruno Díaz López, del Instituto de Investigación de Delfines Nariz de Botella en España, se dedicó a estudiar una población de estas criaturas que hace vida en el Golfo de Aranci, en Italia.
En total, los delfines estudiados fueron 24 (13 hembras y 11 machos). Específicamente, Díaz López prefirió estos grupos ya que se encontraban en un área comúnmente visitada por ser un espacio designado para la observación de delfines. Por lo que, todos los procesos de recolección y registro de datos serían más sencillos.
La clasificación
Luego, para poder clasificar a los individuos, fue necesario establecer un criterio de división. En este caso, se definió que la timidez y extroversión de un delfín se podrían medir según sus reacciones a eventos y desafíos nuevos o arriesgados. Mientras más propenso fuera a acercarse a estos y a investigar, más extrovertido, del otro lado del espectro se encontrarían los tímidos.
Con esto listo, Díaz López realizó casi 200 pruebas en las que expuso a los delfines a dos tipos de situaciones nuevas. La primera implicaba la presencia de buzos nuevos en el área, y la segunda la detonación de una alarma (diseñada para alejar a los delfines de las redes de pesca).
¿Tímido o extrovertido?
Gracias a estas pruebas, fue posible notar una marcada diferencia entre el comportamiento de los delfines reconocidos como tímidos y aquellos que se mostraron más extrovertidos. Los primeros se encargaron siempre de mantener una distancia de al menos 220 pies entre ellos y el nuevo objeto o persona.
Por otro lado, los extrovertidos no dudaron en acercarse a investigar los nuevos elementos que se encontraban en el agua. Ya fuera que se tratara de un buzo extraño o de una ruidosa alarma, la primera respuesta de estas criaturas era la curiosidad.
Algunos pocos se mostraron neutrales, cambiando sus reacciones con el tiempo, pero fueron la minoría. En cuando a géneros, el comportamiento no mostró estar ligado significativamente al sexo de los delfines, por lo que tanto hembras como machos presentaron esquemas de personalidad variados.
El rol de los delfines en su estructura social varía según su personalidad
Además de comprobar esta división de carácteres, Díaz López también logró notar cómo esta intervenía en las relaciones sociales de los delfines. Para ello, estudió los patrones sociales de cada uno de los 24 individuos.
Pudo notar fácilmente que los extrovertidos favorecían más las interacciones sociales y tenían conexiones más profundas. Por ello, pudo concluir que estos tenían un papel activo en el desarrollo de vínculos y en el mantenimiento de los grupos.
Una curiosidad es que los delfines extrovertidos no necesariamente prefirieron a sus pares para compartir, en ocasiones, se los podía ver rondando también a aquellos identificados como tímidos. Debido a lo cual, también queda claro su papel activo en la integración social de aquellos que, por naturaleza, se mantienen más apartados.
La ventaja de los extrovertidos
Con estos resultados, Díaz López también pudo llegar a concluir entonces que la extroversión puede ser una ventaja reproductiva y de supervivencia. Ya que, aquellos individuos con conexiones más fuertes, cuentan con mayores oportunidades de producir descendencia, así como de contar con un grupo de apoyo en situaciones de peligro.
Entre las conclusiones más resaltantes de su estudio también resalta que probablemente los delfines extrovertidos juegan un papel importante en la difusión de información y en el mantenimiento de la estabilidad del grupo.
Por su parte, los delfines tímidos, con su tendencia a alejarse de situaciones nuevas, pueden no ser tan exitosos en el ámbito social, pero se exponen a menos eventos posiblemente peligrosos. Lo que hace que sus posibilidades de supervivencia aumenten.
Hasta la fecha, no se conoce una explicación científica del por qué estas criaturas muestran estas variaciones en su personalidad. Sin embargo, los nuevos descubrimientos sí nos ayudan a comprender un poco más a los delfines y también el mundo en el que se desenvuelven.
Referencia:
When personality matters: personality and social structure in wild bottlenose dolphins, Tursiops truncatus: https://doi.org/10.1016/j.anbehav.2020.03.001