Los árboles son una parte indiscutiblemente importante de nuestro entorno, y su capacidad para convertir el dióxido de carbono en oxígeno significa que podrían desempeñar un papel clave en la compensación de los peores efectos del cambio climático, pero ¿qué tan efectivos serían?
Un nuevo estudio del Instituto de Tecnología Federal de Suiza (ETH Zurich) ha cuantificado que la Tierra tiene espacio para reforestar un área del tamaño de los Estados Unidos, y calcula qué beneficios podría traer. Pero, por supuesto, la historia es más complicada que simplemente plantar mil millones de árboles nuevos.
Acción urgente
Una reciente investigación cuantificó el espacio que el planeta tiene disponible para reforestar y calculó los beneficios que podría generar esa acción.

No todo el dióxido de carbono que se libera a la atmósfera se queda en el aire, y grandes cantidades del gas son absorbidas por los “sumideros de carbono” naturales, como los océanos y los bosques del mundo. Estos podrían ayudar a reducir los efectos de efecto invernadero del CO2 atmosférico, pero lamentablemente sus funciones no pueden mantenerse al día con nuestra producción actual.
El estudio, es el primero de su tipo en cuantificar cuántos árboles puede soportar la Tierra, dónde podrían existir y cuánto carbono podrían almacenar. Los investigadores enfatizan que la necesidad de acción es urgente porque el clima ya está cambiando y su efecto reduce la cantidad de tierra que puede soportar nuevos bosques.
Bajo las condiciones climáticas actuales, el equipo calculó que el área terrestre de la Tierra podría soportar 4.400 millones de hectáreas de cobertura arbórea continua. Por el momento tenemos 2.800 millones de hectáreas de árboles. Pero no podemos simplemente llenar los 1.600 millones de hectáreas restantes con árboles, por supuesto, los humanos usamos una cantidad sustancial de esa tierra.
Medida complementaria
Del potencial de restauración total los investigadores excluyeron las ciudades o las áreas agrícolas, ya que estos espacios son necesarias para la vida humana.

Con esos espacios eliminados de la ecuación, los investigadores llegaron a un total de 900 millones de hectáreas, un área del tamaño de los Estados Unidos, que está lista para la reforestación. Una vez que estos nuevos bosques hayan madurado, el equipo calculó que podrían almacenar alrededor de 205 mil millones de toneladas de carbono, una parte significativa de los 380 mil millones de toneladas que los humanos hemos producido desde 1901.
Sin embargo, tomará décadas para que los nuevos bosques maduren y alcancen ese potencial. En todo caso, expresan los investigadores, se trata de una medida complementaria, por lo que es de vital importancia la protección de los bosques existentes, y mientras se busca otras soluciones climáticas, continuar eliminando los combustibles fósiles de nuestras economías.
Los escenarios futuros propuestos por el Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC) indican que limitar el cambio climático a 1,5 ° C requerirá hasta mil millones de hectáreas adicionales de bosque para el año 2050, incluso mientras se reducen drásticamente las emisiones de CO2. El estudio confirma que la proyección de este escenario es “indudablemente alcanzable en el clima actual”.
Referencia: The global tree restoration potential. Science, 2019. https://doi.org/10.1126/science.aax0848