La era digital ha traído tanto grandes beneficios con sus avances como también difíciles paradojas y contrastes, sobre todo en cuanto a información y comunicación se refiere.
Para nadie es un secreto que los gobiernos realizan escuchas telefónicas en casos concretos, sobre todo en investigaciones criminales, pero algunos utilizan la herramienta para llevar sus métodos de control más allá.
Por otra parte, bandas organizadas que utilizan ciertos canales digitales para planificar sus estrategias y otras turbiedades. Esto ha hecho que la confianza en el internet se haya reducido y con ella, la libertad y privacidad de los usuarios.
Facebook, en el ojo del huracán de los gobiernos y la privacidad, se ha salvado de una en medio de tantas acusaciones y sospechas. Según informa Reuters, un juez de los Estados Unidos emitió un fallo a favor de la compañía que lo libra de tener que permitir las escuchas telefónicas en las llamadas de Messenger.
De acuerdo con la ley, las compañías de telecomunicaciones deben permitirle el acceso a las fuerzas policiales para monitorear las llamadas telefónicas si existe una orden, sin embargo, con las llamadas en internet es otro el panorama. Simplemente la ley las excluye de esta obligación.
Detrás de las bandas delictivas
El caso surgió a raíz del arresto de casi dos decenas de miembros pertenecientes a la Mara Salvatrucha, la popular banda de criminales que ha azotado Centroamérica y Norteamérica desde la década de los ochenta. A los sospechosos se les acusó de asesinato y otros crímenes.
Según se relata en la investigación, los sospechosos se comunicaban por llamadas regulares y por mensajes de texto en Messenger. Todos estos mensajes fueron monitoreados por el FBI y faltaban tres llamadas por Messenger que, dada la sentencia del juez, no se pueden escuchar.
Facebook podría facilitar el acceso a estas llamadas, sin embargo, la compañía no está dispuesta a alterar su software para apoyar al FBI. Tal como resaltan en Reuters, Apple pasó por un caso similar en 2016 cuando se negó a darle acceso al iPhone de un terrorista al FBI.