El Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés) publicó este viernes un reporte donde identifican más de 65 maneras en que la tecnología blockchain se puede aplicar a los desafíos ambientales más acuciantes del mundo.
El reporte se publicó en el marco del la Cumbre Global de Acción Climática en California.
En el reporte también indentifican ocho «cambiadores de juegos» donde la tecnología tiene el potencial de alterar, u optimizar sustancialmente, los sistemas que son críticos para abordar muchos desafíos ambientales: en la transparencia en las cadenas de suministro; la gestión de recursos en forma descentralizada y sostenible; proporcionar nuevas fuentes de sostenibilidad financiar; Incentivar las economías circulares; en transformar los mercados del carbón; crear nuevas formas de monitorear, informar y reportar la sostenibilidad; en la preparación automática ante desastres naturales y dispensación de ayuda humanitaria; y en la creación de plataformas de gestión de la tierra.
El reporte señala que asta la fecha, estas oportunidades siguen sin ser explotadas por los inversores y los gobiernos, sin embargo, representan una oportunidad para desbloquear y monetizar el valor que actualmente está incrustado en los sistemas ambientales.
«El potencial de Blockchain para redefinir fundamentalmente cómo operan los negocios, el gobierno y la sociedad ha generado un gran entusiasmo” dijo Sheila Warren, directora de Blockchain y Distribute Ledger Technology en el Centro de Cuarta Revolución Industrial del WEF. “A pesar de este entusiasmo, hay muchos desafíos que superar: sigue siendo una tecnología incipiente en rápido desarrollo. Ahora es el momento adecuado para que las partes interesadas trabajen juntas para garantizar el desarrollo de soluciones responsables de blockchain que sean buenas para las personas y el planeta”.
Para tratar de atemperar dicho entusiasmo e identificar si realmente la tecnología blockchain puede ser utilizada en un problema medio ambiental particular, en el reporte proponen que nos plateamos tres preguntas: ¿la tecnología resolverá tu problema real?, ¿Puedes gestionar de manera aceptable las consecuencias no deseadas? y ¿Has construido el ecosistema correcto con los interesados?