Un grupo de investigadores de la Universidad de Pittsburgh, en Estados Unidos, ha desarrollado un sistema de Inteligencia Artificial (IA) que produce rostros únicos para anuncios publicitarios a partir de una imagen predeterminada.
Según Christopher Thomas, uno de los investigadores que llevó a cabo el estudio, este nuevo proyecto está basado en un trabajo anterior de su equipo, que buscó crear métodos automatizados para comprender mejor la publicidad. En este sentido, aseguró:
En nuestro proyecto anterior, queríamos ver si las máquinas podían decodificar la compleja retórica visual que se encuentra en los anuncios (…) En este documento, no sólo queríamos entender los anuncios, sino que queríamos ver si las máquinas podían generar ese contenido persuasivo de forma automática.
Como bien sabemos, las principales funciones de la industria de la publicidad son la promoción de productos a través de la utilización de un lenguaje e imágenes persuasivos. En este objetivo, los rostros forman un elemento fundamental, ya que normalmente son representados de manera distinta según el producto ofrecido y el mensaje que el anuncio incluya.
Junto a Adriana Kovashka, una de sus colegas de la Universidad de Pittsburgh, Thomas utilizó el aprendizaje automático con el fin de generar rostros ‘persuasivos’ que pudieran funcionar de manera correcta para diversos tipos de anuncios. Para ello, utilizó un modelo llamado ‘autoencoder variacional condicional’, también llamado ‘modelo generativo’, que a su vez son modelos de IA que aprenden a crear datos similares a los que se les fueron suministrados.
Cuando este modelo de aprendizaje automático es entrenado con una base de datos amplia, comienza a representar los aspectos semánticos dentro de los valores o números. En el caso del modelo desarrollado por Thomas, un número control la forma del rostro, otro el tono de la piel, y así sucesivamente.
Asimismo, agregaron características que podrían resultar convenientes para anuncios particulares, condicionando al modelo de aprendizaje automático para mostrar rostros con lentes, entre otras características.
Los hallazgos sugieren que, en el futuro, las compañías que crean anuncios podrán crear publicidad personalizada y adaptada a sus clientes individuales. Por ejemplo, podrían crear rostros que se asemejen al del espectador, para que éste se identifique más con el anuncio.
Finalmente, se conoció que los expertos están buscando alternativas para mejorar sus imágenes generadas para que coincidan con la misma calidad de las que se producen a partir de grandes cantidades de datos.