Con frecuencia se ha asumido que las variaciones hormonales femeninas, afectan el rendimiento cognitivo, ubicando el desempeño intelectual de las mujeres en desventaja, cuando éstas se encuentran en el ciclo de menstruación. Sin embargo, un estudio realizado por investigadores de la Escuela de Medicina de Hannover y el Hospital Universitario de Zurich, revela que no existe evidencia que soporte esa afirmación y afirma que la capacidad cognitiva femenina no se ve afectada por la menstruación.
Varias hormonas fluctúan durante la menstruación; cambian los niveles de estrógeno, progesterona y testosterona, y estas alteraciones sin duda estimulan ciertos efectos que suelen estar asociados con mayores niveles de depresión, ansiedad y cambios en el estado de ánimo, además de otras molestias, como calambres, dolores de cabeza y otros; pero la capacidad de pensar con claridad es algo completamente distinto.
La profesora Brigitte Leeners, autora principal del estudio, explica: “El mito que afirma que la menstruación afecta el rendimiento cognitivo, sólo refleja un mezcla de prejuicios y datos pocos fiables. Muchos de estos trabajos, se basaron en muestras reducidas; otros no toman la cantidad necesaria de mediciones, entre otras deficiencias.”
El estudio realizado por los investigadores utiliza una muestra mucho mayor y realiza un seguimiento de las mujeres en dos ciclos menstruales consecutivos. El equipo reclutó a 88 mujeres a someterse a un seguimiento detallado para investigar los cambios, en tres procesos cognitivos en diferentes etapas en el ciclo menstrual.
Se examinaron tres aspectos de la cognición a través de dos ciclos menstruales, y se encontró que los niveles de estrógeno, progesterona y testosterona en su sistema no tuvieron ningún impacto en su memoria de trabajo, sesgo cognitivo o capacidad de prestar atención a dos cosas a la vez.
Si bien el análisis de los resultados del primer ciclo sugiere que el sesgo cognitivo y la atención se vieron ligeramente afectados, estos resultados no se repitieron en el segundo ciclo. El equipo buscó diferencias y cambios de rendimiento entre las participantes del estudio a lo largo de dos ciclos menstruales, y no encontraron evidencias que soportaran las supuestas alteraciones cognitivas.
La profesora Leeners afirmó: “Los cambios hormonales relacionados con el ciclo menstrual, no muestran ninguna asociación con el rendimiento cognitivo. Aunque puede haber excepciones individuales, la claridad de pensamiento de las mujeres en general, no es perturbada por los cambios hormonales que ocurren con su ciclo menstrual.”
Los autores del estudio advierten que aún queda trabajo por hacer; si bien esta investigación representa un paso significativo, en el futuro se deben examinar muestras y submuestras más grandes, incluir mujeres con trastornos hormonales, así como considerar otras pruebas cognitivas, a fin de poder proporcionar una visión más completa de la forma en que el ciclo menstrual afecta al cerebro.