Si lo de Mark Zuckerberg tapando la cámara con adhesivo te pareció paranoia, pues juzga las acciones de Theresa May, la primer ministro Británica recién elegida tras la salida de David Cameron después del Brexit. Resulta que la primer ministro, ha prohibido el uso de Apple Watch a todos los que participen en la reuniones de gabinete.
Según Telegraph, la decisión se ha tomado por las fuertes preocupaciones que tienen el Reino Unido de sufrir ataques cibernéticos por parte de Rusia. Estas preocupaciones se han intensificado en las grandes potencias luego de que investigaciones por EE.UU apuntarán a que Rusia se encuentra detrás de una serie de ataques al país, y de estar tratando de influir en las votaciones del país.
Sin embargo, todo apunta que la prohibición no se limita al Apple Watch, siendo que todo dispositivo electrónico que pueda ser hackeado y utilizado para escuchar estará limitado su uso dentro de las reuniones de alta seguridad.